Israel tensa la cuerda antes de la Asamblea General de la Unión Europea de Radiodifusión de esta semana, cuando los países miembros se reunirán los días 4 y 5 de diciembre en Ginebra (Suiza) para debatir sobre la participación del país hebreo en Eurovisión 2026. Danny Danon, embajador israelí en la ONU, ha atacado a España a través de sus redes sociales por la posición que RTVE ha tomado en este conflicto, calificando de “insostenible” la permanencia de Israel en el certamen tras el genocidio en Gaza y el uso que han hecho del festival como instrumento de propaganda política.
“España necesita que le recuerden que Eurovisión es una celebración de la cultura, la música y la unidad, no un escenario para difundir agendas extremistas”, empieza diciendo Dannon en un post publicado en su cuenta personal en X -antes conocido como Twitter-.
El embajador de Israel carga contra España
Es entonces cuando el embajador alude con desdén a la racha temporal que España acumula sin llevarse la victoria en Eurovisión: “En lugar de intentar dar lecciones al mundo, quizá España debería centrarse primero en la música. Después de todo, han pasado 56 años desde la última vez que ganaron”, recuerda el político, reivindicando los triunfos de Israel en el certamen, donde ha acariciado la gloria en los dos últimos años, aupado por campañas gubernamentales para comprar el televoto que casi alcanzan su objetivo.
“Israel ha enviado a lo largo de los años artistas brillantes que trajeron orgullo internacional, incluidos cuatro ganadores del primer lugar: Netta Barzilai, Dana International, Gali Atari e Izhar Cohen”, enumera Dannon, que comparte una foto de los cuatro representantes de Israel que han ganado Eurovisión a lo largo de la historia.
“Mientras algunos buscan difundir el odio a nivel global, Israel seguirá promoviendo nuestra cultura”, se atreve a decir el representante de Israel, cuya masacre indiscriminada sobre Palestina roza los 70.000 muertos, cifra que no deja de aumentar por los ataques que se siguen ejerciendo sobre Gaza a pesar del anunciado alto el fuego.
Esta semana, Eurovisión se juega su futuro en la cumbre de Ginebra en la que se llevará a cabo un debate entre los países que forman parte de la UER sobre la participación de Israel. Allí, el organismo tratará de convencer a los países que amenazaron con abandonar el festival si Israel continúa, alegando haber tomado medidas con el cambio en el sistema de votación. España, que calificó las medidas de “insuficientes”, reiteraba hace unos días su postura con el certamen, asegurando que es “insostenible” que Israel permanezca después de todo lo ocurrido en los dos últimos años: “Los derechos humanos no son un concurso”, defendía José Pablo López, presidente de RTVE.