Declaraciones

Jero García desvela por qué 'GH' influyó en el fin de 'Hermano Mayor', y qué no emitían: “Me sacaron una pistola”

Jero García, exboxeador español que en 2015 ganó una gran popularidad como el presentador que sustituyó a Pedro García Aguado en Hermano Mayor, ha concedido una entrevista al videopodcast The Wild Project en la que comparte algunos secretos sobre aquella faceta televisiva. “Nosotros estábamos en las trincheras”, aseguró el madrileño en su charla con Jordi Wild, desmintiendo los rumores que durante años apuntaron a que el mítico programa de Cuatro estaba guionizado.

Como prueba de ello, García se dispuso a recordar varios episodios violentos que vivió durante las grabaciones y que Mediaset no llegó a emitir en televisión al tratarse de hechos constitutivos de delito: “Eso me lo he comido yo”, aseguró el exdeportista, exponiendo varios ejemplos. “A mí me han sacado una pistola, me han sacado una extensible, me han sacado un puñal, me han sacado un espray. Ha habido niños a los que he tenido que reducir”, enumeró el invitado.

“Uno me sacó un puñal y me amenazó, al ver que no me achantaba, saltó por una ventana. Llegó a intentar atropellarme con una moto. En esos casos, yo solo podía reducirles y que luego el equipo se lo llevase”, expresó, contando la dura realidad que se esconde detrás del programa y detallando cómo era el plan de grabación de cada entrega del formato.

Según García, en cada caso, un grupo de redactores convivía durante dos días con el joven protagonista de Hermano Mayor y su familia, evaluando su comportamiento y diseñando una serie de actividades que luego se desarrollarían cuando él entraba en acción. Esto ocurría al tercer día, cuando el participante ya estaba acostumbrado a las cámaras y, según señaló, se mostraba más natural. “Yo llegaba a putearle”, reconoció Jero, explicando su modus operandi. Según el presentador, él intentaba hacer sentir al menor el daño que él infligía a su entorno. Un método que, tal y como prometió, estaba avalado por un equipo psicopedagógico.

Tras varios días de tensión, arrancaba un periodo más amable que culminaba con el enfrentamiento a los jóvenes de imágenes sobre su comportamiento: “Esa es la puta terapia. Es una terapia de choque”, indicó el entrevistado, que afirmó que todo el procedimiento duraba unos 12 días. “He echado de menos que se le hiciera un mayor seguimiento a los casos en el tiempo, aunque fuera en otro programa que no buscase la audiencia”, afirmó, haciendo autocrítica.

Del final de 'Hermano Mayor' a su mala relación con García Aguado

Además, Jero García desveló los problemas en la productora (Plural Entertainment) por los que Mediaset decidió finalzar el formato: “2017 fue un año muy malo para Mediaset. Es el año de muchos escándalos. Es la presunta violación de Gran Hermano, hay un problema con otro programa que se llamaba A cara de perro, unas cosas que se liaron, y muchos problemas de producción en Hermano Mayor. Niños que antes de ir les habían puesto orden de alejamiento... Cosas que Vasile ya no quería. Después de lo de la violación en Gran Hermano no lo quería y nos mandaron a descansar”, recordó.

El exboxeador explicó que poco después acabó “el tiempo que tenía de exclusividad”, lo que le ocasionó “un pequeño lío con la productora”: “No me querían pagar la exclusividad, tuve que poner abogados y al final se solucionó. Pero fue la cadena la que lo tuvo que solucionar. Porque si yo hubiera hecho público que no me quieren pagar la exclusividad le hubieran echado la culpa a la cadena. Y la cadena tuvo que poner abogados para que se solucionase. Y desde el momento en el que apareció un abogado de la cadena me pagaron”, relató, añadiendo que, por todo ello, salió “muy desencantado de la tele”.

Jero García quiso también sacar a la palestra unas supuestas declaraciones de su antecesor, Pedro García Aguado: “Yo no sé lo que harían en sus programas, pero yo afirmo rotundamente que en los míos jamás ocurrió eso. Jamás se drogó a los chavales, jamás se les dio de beber para emborracharlos. Yo no sé qué pasaría en sus programas, pero en los míos jamás lo hubiera permitido en ningún momento. Otra cosa es que los pilláramos de marcha y los sacáramos de los garitos, eso es su vida. Pero lo que se ha intentado decir... Yo no sé si es por inquina al programa, pero esas declaraciones sobran porque me afectan a mí”, aseveró, visiblemente molesto.

Fue ahí cuando Jordi Wild le preguntó si tenía relación con el exwaterpolista: “Ninguna. Cero. Porque no empezamos bien. Él empezó a meterse conmigo en redes y a criticar mi trabajo. Le preguntaron por qué no seguía en Hermano Mayor y dijo: 'Ahora hay un boxeador, así en tono despectivo, y parece que no le va bien'. Yo me callé porque estas cosas las soluciono a la cara. A mi las mariconadas estas no me van, si tienes un problema lo hablamos a la cara”, declaró, recordando cómo luego Pedro García Aguado negó haber escrito ese mensaje en redes sociales.

Tras aquel episodio, terminaron reconduciendo la situación, deseándose suerte mutuamente en sus proyectos, aunque reconoció no haber coincidido nunca en persona con él. “Además, cuando Ayuso lo nombra director de la juventud y tal, yo me ofrezco, diciéndole que tengo una fundación. ¿Te contestó a ti? Pues ya está”, desveló antes de reconocer que a él también le ofrecieron participar en Supervivientes y GH VIP y lo rechazó.

Finalmente, Jero García hizo balance sobre su experiencia al frente del programa: “Entrar en las trincheras de la educación, meterme en sus casas, en el trato diario con sus padres, me dio unas herramientas y armas que he podido extrapolar a mi vida diaria y a mi trabajo con la educación social”, apuntó. No obstante, no obvió el precio personal que tuvo que pagar durante el proceso: “Yo era totalmente infeliz, todo el mundo pensaba que tenía un éxito cojonudo y estaba yendo al psicólogo”, concluyó.