José Mota tacha de “deplorable” a Paco Sanz, por quien dice sentir “vergüenza ajena”
“Siento mucha vergüenza ajena”, ha dicho José Mota una vez abandonaba la Audiencia Provincial de Madrid, donde se celebra el juicio por presunta estafa contra Paco Sanz, el “hombre de los 2.000 tumores”. El humorista ha atendido a Espejo Público según salía de las dependencias judiciales, a las que al igual que otros famosos se presentó como acusación particular, y sin haber tenido que declarar.
“Al final, no. Como ha reconocido el delito no han considerado que tenga que declarar, ni yo ni otros muchos”, explicaba ante el micrófono de Antena 3. En esta conexión, ha insistido en que la reclamación económica que se realiza contra el individuo “es lo de menos” y ha tachado de deplorable a Sanz.
“Siento mucha vergüenza ajena de que haya gente que obre así jugando con la salud. Sobre todo porque puede haber gente que de verdad lo necesite y se sienta perjudicada por conductas de este tipo”, recalcaba el manchego. “No sé cómo hay gente que hace eso”.
Mota, recordó, contribuyó con una primera donación de 3.000 en abril de 2013 para Sanz. Tras ello se implicaría en su causa participando en eventos y difundiendo su caso. Puso en valor también la buena voluntad del cómico Santi Rodríguez, “que se implicó muchísimo y organizó un festival para ayudar” al ahora juzgado. “Está hecho polvo”, decía del otrora “frutero” de Aída.
Nacho Guerreros y David Muro, otros famosos que acudieron
Como el cómico, también acudieron a la Audiencia Provincial famosos como Nacho Guerreros o David Muro, que igualmente atendieron a los medios de comunicación antes de entrar. “Pedí ayuda para este señor en las redes sociales, incluso puse un número de cuenta.
Es gentuza, me escandaliza que estos estafadores campen a sus anchas“, declaró el actor de La que se avecina, a quien no estafó directamente, pero que aprovechó su popularidad para animar a la gente a que le ayudasen. Pedro García Aguado sí testificó, en su caso, a través de videoconferencia.
Acusado de fingir la gravedad de su enfermedad y estafar 264.780 euros a miles de personas, entre ellos a estas celebridades, Sanz llegó este lunes a un acuerdo por el que aceptaba una pena de dos años de cárcel, en lugar de los seis que pedía inicialmente la Fiscalía. La que era su novia por aquel entonces, Lucía Carmona, se rebajaba su pena de tres a un año y nueve meses.