Australia ya tiene canción y representante para Eurovisión 2017. El joven Isaiah Firebrace ha sido el elegido para defender los intereses del país oceánico en la próxima edición del certamen, que tendrá lugar en mayo en Kiev. Con la canción 'Don't come easy', Firebrace tendrá el difícil reto de superar los buenos resultados cosechados por Australia en sus primeras dos participaciones, donde quedó quinto en 2015 y segundo en 2016.