Desde que se supo que va a presentar la próxima edición del Grand Prix con Ramón García, Lalachus no ha parado de recibir insultos en las redes sociales. Es lo mismo que le ocurrió cuando RTVE le dio la oportunidad de comerse las uvas junto a David Broncano desde la Puerta del Sol de Madrid: el foco está puesto en su aspecto físico, no en su valía profesional.
“Si estás un poquito enfadado con la vida, le pides un abrazo a alguien, que al final lo que tú necesitas es un poquito de amor, te das un paseo, te tomas un tinto de verano y dejas en paz a la gente que solo quiere trabajar y ser feliz”, reaccionó la humorista desde La Revuelta hace unos días.
Este sábado, Anne Igartiburu se sumó a otros tantos comunicadores que han dado la cara por la famosa humorista madrileña. “Desafortunadamente, es el pan nuestro de cada día: el odio en redes sociales a través de los mensajes anónimos en forma de gordofobia”, lamenta la presentadora de D Corazón.
En el contexto actual es difícil –por no decir imposible– frenar la publicación de insultos y amenazas en las redes sociales, pero Igartiburu cree que hay algo que podrían hacer los gobiernos y las plataformas para acabar con la impunidad de los acosadores: “Que haya un nombre, un apellido y un DNI detrás de cada persona que tenga redes sociales”.