Asraf desvela las secuelas que le ha dejado 'Supervivientes' y las dificultades para adaptarse a su vida normal
Asraf Beno se ha sincerado con sus seguidores sobre su paso por Supervivientes 2023. Dos semanas después de la final del reality, en la que quedó en cuarta posición, el modelo ha realizado una ronda de preguntas y respuestas en Instagram para responder a algunas cuestiones acerca de su experiencia en la isla, donde pasó cuatro meses. Una larga temporada que todavía tiene muy presente en su cabeza. Hasta el punto de que le está costando adaptarse a la vida que tenía antes del programa.
“Cada día me acuerdo de Supervivientes. Veo un árbol y pienso qué fruto es. Voy a la playa y quiero coger cangrejos que veo en la roca... O sea, que se me ha quedado un poco de trauma”, asegura Asraf, que dice sentirse “raro” y “un poco en shock” después de tantos días llevando la vida de un 'robinson'. De hecho, dice que le resulta “muy fuerte ir a un centro comercial, porque hay muchísima gente y es una locura”. Y también que ahora no ve “las calles ni las plantas de la misma manera”, sino que las ve “a nivel supervivencia”. “El otro día vi una cucaracha y la cogí”, pone como ejemplo.
Por supuesto, el concursante aún tiene “muchísimas” secuelas físicas, como “rasguños de corales, de erizos y de cuchillos por todos los lados”. Aunque, a juzgar por sus palabras, lo que más le está costando es dormir. “Me cuesta bastante dormir en la cama. Los primeros días me dolía mucho la espalda (...) Dormía poquísimo porque me sentía incómodo”, comenta. Para remediarlo ha tomado una llamativa decisión: “Ahora en casa estoy durmiendo bastante en el sofá. No sé qué me pasa, pero me siento más cómodo en la incomodidad. En la cama he dormido dos días o tres”.
“Volvería una y otra vez a 'Supervivientes'”
Esto, unido a todo lo que venía arrastrando en Honduras, lo ha sumido en un estado de cansancio total: “Todavía no me encuentro con energía. Ayer fui al gimnasio y no pude hacer nada”. En cambio, sí tiene fuerzas para comer. Algo que, asegura, está haciendo con mucho gusto a base de chucherías, pizzas y hamburguesas, tres de las cosas que más añoraba comer en Supervivientes. De ahí que, según sus cálculos, haya engordado unos 5 kilos desde que terminó el programa, aunque aclara que “todavía no tengo un efecto rebote gigante ni ansiedad por la comida”.
Pese a las secuelas físicas y los problemas para adaptarse a su vida anterior, Asraf dice que echa de menos Supervivientes y que regresaría al reality sin dudarlo. “Supervivientes me ha cambiado la vida. Volvería una y otra vez. No quería salir de ahí porque, a nivel de supervivencia, me lo pasaba muy bien”, apunta el novio de Isa Pantoja, que no cree que tuviera tanta fuerza mental en el concurso, pero sí mucha ilusión.
“No creo que tenga tanta fuerza mental. Estaba destrozadísimo. No he parado de llorar en el concurso. Estaba muerto. Destrozado. Pero creo que siempre he mantenido esa ilusión. La ilusión es lo que me ha llevado a aguantar y a seguir. La ilusión por la supervivencia y por estar ahí, en un programa al que llevaba queriendo ir mucho tiempo. También ilusión por pensar en mi familia”, explica.
“He crecido más como persona en SV que en GH VIP”
A todo esto, el concursante se queda con 'La noria infernal' como su juego favorito -“me lo pasé pipa, pero también se sufre muchísimo”-. Aunque puestos a quedarse, si algo rescata de la experiencia es el cariño que ha recibido del público. “Es algo increíble. Al principio no era nada consciente del cariño de la gente y de lo que me querían, pero poco a poco he salido a centros comerciales y gasolineras y todo el mundo estaba supercontento y dándome abrazos. Se nota el cariño de la gente”.
Por último, Asraf compara su experiencia en Supervivientes 2023 con la que vivió en su día en GH VIP 6 (2018), donde también ocupó la cuarta posición: “Son experiencias totalmente diferentes. Los dos me han dado la vida y me lo he pasado genial, pero donde he crecido más como persona es en Supervivientes”.