La broma de Chenoa en 'Dog house' por un perro: “Me ha hecho una cobra, ¡a mí!”
Dog house vivió con alegría su penúltima noche en La 1 de RTVE, porque a pesar de que el programa emitirá su octava y última entrega el próximo martes 2 de septiembre, logró un pleno de adopciones en los cinco nuevos casos que presentó. Y eso que algunos eran difíciles, por la edad o el estado de los animales.
Uno de esos casos fue el de Lluch, un perro que ya tenía 10 años y llegó al albergue junto a su hermano después de que su dueña, una mujer mayor, ingresase en una residencia y su hijo no se hiciera cargo de él. La cuidadora explicó a Chenoa que al haber tenido un hogar, cuando son abandonados lo pasan mucho peor. Y el programa contó que, por su edad, los perros mayores tienen muchas menos posibilidades de adopción.
Pero el camino de Lluch se cruzó con el de María, que quería adoptar un perro ya que el suyo había fallecido hace tres meses, superando su propia idea de darse un tiempo al hacerse una reflexión: “Aquí hay un montón de perros que tienen muchos problemas y que merecen una vida mejor”.
Junto a su hermana Assunta fue al programa, y explicó que quería darle una segunda oportunidad a alguno de esos perros que tienen una adopción más complicada. Su hermana, sin embargo, estaba preocupada porque si el perro era mayor, tenía algún problema de movilidad o era demasiado grande, no podría acompañarlas en sus paseos por la montaña, ni tan siquiera metido en una mochila especial.
Pero al conocerse, tanto María como Assunta lo tuvieron claro. Lluch las cautivó, y cuando Chenoa volvió al jardín simplemente fue para celebrar la decisión de adoptarlo y ponerle la correa para que los tres se fuesen juntos... aunque el perro tuvo un momento juguetón y huyó de la presentadora. “Me ha hecho una cobra, ¡a mí! Me cago en la leche...”, dijo Chenoa, riéndose inmediatamente y dirigiéndose al perro con el mismo tono de broma: “Lluch no me hagas cobras, por favor”.
Con esa risa, la presentadora y cantante pareció dejar claro que estaba haciendo una broma sobre sí misma, tras la célebre “cobra” de la que acusaron a David Bisbal haberle hecho durante el concierto de reencuentro de Operación Triunfo el 31 de octubre de 2016, y que ha quedado como uno de los momentos virales y recordados de España.
Más allá de la anécdota y la broma, lo importante para el programa (y para Chenoa) es que cuando Dog house fue unas semanas después a ver si la adopción se había confirmado, Lluch y María seguían juntos, y que su hermana Assunta estaba encantada aunque no pudieran llevársele a sus rutas.
