María Castro, que interpreta el papel de Pía en la serie La Promesa que cada tarde emite con éxito La 1 de RTVE, ha concedido una entrevista a la revista Lecturas en la que se muestra encantada por la marcha de la serie: “Laboralmente estoy muy contenta. Aparte de que el personaje es bonito y la serie está muy bien hecha, el set de la serie es superagradable”.
Sobre el compañerismo que viven, la actriz explica: “No hemos tenido la visita de ningún actor haciendo un personaje episódico que me haya hecho decir: 'A ver si se va este'. Toda la gente que llega lo hace con muchas ganas de trabajar, de hacer la vida fácil al compañero”. Motivo por el que valora que “laboralmente es muy bonita de hacer”.
La periodista le pregunta precisamente por una compañera como Ana Garcés, que era la protagonista de la serie pero dijo adiós hace unos meses. Cuestionada sobre cómo están llevando su ausencia, Castro contetualiza primero que el equipo y sus compañeros ya lo sabían “hacía meses”, y explica que “ella se fue de la serie hace ya un montón de tiempo”. Su trato con Garcés era especialmente cercano por una circunstancia: “Ella es mi compañera de camerino, me he quedado solita”, bromea la actriz.
Valorando su decisión, María Castro cuenta: “Yo feliz por ella porque es lo que quería. Ana sentía que había acabado su paso por La Promesa, por lo tanto, se ha cumplido su deseo”. Y celebra que no haya afectado al éxito de la ficción: “Aunque siempre tienes miedo de la reacción del público, yo nunca creo que nadie sea imprescindible. Ninguna somos indispensables, aunque ella hizo un papelón espectacular. Ella, como persona y como actriz, estuvo estupenda en La Promesa. Pero al final nadie es indispensable”.
La actriz, con una amplia carrera profesional, reconoce que pensó así desde el primer momento: “Cuando me enteré de que se iba, pensé: 'Unos se irán, vendrán otros, y quedará la cosa a pachas'. Y no me equivoqué”. Castro concluye: “La audiencia sigue siendo la misma. De hecho, hemos tenido varios picos de audiencia desde entonces. Porque, claro, la gente que quería a Jana ahora tiene que vengar su muerte”.
La emisión de La Promesa no descansa ni en verano, gracias a que todo su equipo grabó muchos capítulos para poder seguir ofreciéndose mientras disfrutaban de unas vacaciones de las que ya han regresado. La serie se ha asentado como el principal puntal de las tardes de La 1 de RTVE, en torno al cual la cadena pública intenta construir su franja vespertina.