“El enemigo en casa” cambia de cadena. El formato de la BBC, presentado por Daniel Domenjó, que se emite en La Primera por la tarde, ha ido perdiendo espectadores desde el día de su estreno, el pasado 25 de abril. El pasado jueves fue visto por una media de 608.000 (8,6% de cuota) mientras que el viernes el resultado no fue mucho mejor, 11.1% y 846.000. En los catorce programas que ha emitido desde su estreno, el concurso ha obtenido una cuota de pantalla media de 11.7% y 854.000 espectadores, empeorando los datos de la reposición de la serie “Cuéntame” que se difundía en el mismo horario en los meses anteriores. Con estos resultados, la Dirección de TVE ha anunciado ya que el concurso pasa a emitirse en la segunda cadena de TVE a las dos y cuarto de la tarde. La nota de TVE intenta justificar el fiasco de audiencia señalando que con el cambio se “intenta afianzar y dar tiempo a un programa” que “con más rodaje puede lograr mejores resultados en el futuro”. Algo parecido se contó en la nota de prensa cuando “El rival más débil” pasó también a La 2 por sus insuficientes resultados en la primera cadena. Nunca volvió a La Primera, claro, aunque el productor puede considerarse afortunado porque el programa se mantuvo una larga temporada en la segunda cadena. Para cubrir la franja horaria en la que se emitía “El enemigo en casa” TVE ampliará a dos el número de capítulos emitidos del culebrón “Amor real”, a los que seguirá la telenovela de Europroducciones “Obsesión” y la repetición de la serie “Cuéntame cómo pasó”. Todas estas modificaciones tendrán una duración limitada en espera del estreno, ya anunciado hace dos semanas por Vertele, de “España directo”, una revista de información de sociedad, en directo, que dirigirá Ricardo Medina y producirá Mediapro. “El enemigo”, un concurso de conocimientos y estrategia “El enemigo en casa” es un concurso de conocimientos y estrategia creado por la BBC. En el programa, cinco concursantes responden a preguntas culturales, pero entre ellos se encuentra un infiltrado que conoce de antemano las preguntas y las respuestas, por lo que los participantes tendrán la misión de descubrir quién es el “enemigo en casa”. Si lo dejan escapar, se irá con todo el dinero a su casa. Dirigido por Isabel Raventós y Sergi Schaaf (responsable de “Saber y ganar”) y producido por Atomis Media, “El enemigo en casa” combina dos ingredientes fundamentales: cultura general y un juego de desenmascaramiento en busca de la verdad. Cada uno de los concursantes, y especialmente “el enemigo”, debe plantearse una estrategia de juego. Los concursantes inocentes deben inspirar confianza para no dar la impresión de que son ellos los tramposos porque, si son escogidos por sus compañeros como el infiltrado, perderán el premio. El enemigo puede diseñar varias estrategias: no contestar a ninguna pregunta para que los demás crean que no conoce las respuestas o, por el contrario, responder las suficientes para que piensen que no es posible que se destape con tanta facilidad. De la elección de su estrategia y de su capacidad para que no le descubran dependerá su victoria. 6.000 euros cada día Este nuevo concurso para las tardes de La Primera repartirá premios diarios de un máximo de 6.000 euros y el público puede intervenir también desde su casa, por teléfono o SMS para conseguir premios en metálico. Durante los 60 minutos de duración del programa, el presentador, que desconoce cual de los cinco concursantes es el enemigo, va recopilando o dando información sobre los concursantes. También indaga sobre las sospechas que tiene cada concursante de los demás. El presentador Daniel Domenjó, Premio APEI (Asociación Profesional Española de Informadores) en 2003 al Presentador Revelación en el apartado de televisión, fue conductor de “El debate de La 2” en TVE y de otros espacios como“ l’Informatiu Migdia”, “Catalunya Avui”, “Any Dalí” y “Així ens veuen” en TVE en Cataluña. Problemas de estreno “El enemigo en casa” ya tuvo problemas a la hora del estreno, inicialmente previsto para el 7 de marzo y que se retrasó hasta el 25 de abril por razones que Salvador Augustín, director de Programas de TVE, achacó a “la complejidad de la producción”.