Obama agradece a Mubarak su apoyo al Tribunal Especial para Líbano

WASHINGTON, 19 (Reuters/EP)

El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, ha agradecido a su homólogo egipcio, Hosni Mubarak, su apoyo al Tribunal Especial para Líbano, que investiga el asesinato del ex primer ministro Rafik al Hariri, ocurrido en 2005. Además, le ha trasladado su deseo de que la región pueda recuperar la calma tras las revueltas de Túnez.

El norteamericano alabó una vez más la labor del tribunal 'ad hoc' al recordar que “está tratando de terminar con la era de impunidad de los asesinatos de políticos en Líbano y de lograr la Justicia para el pueblo libanés”.

Líbano se encuentra sumergido en una crisis política tras la salida del Gobierno de los ministros del movimiento Hezbolá y varios de sus aliados por la negativa del actual 'premier', Saad al Hariri, --hijo del fallecido-- a retirar su apoyo a la labor del tribunal.

El movimiento chií se opone a estas investigaciones porque sospecha que algunos de sus miembros podrían figurar en la acusación por el atentado del 14 de febrero de 2005 en el que, además del mandatario, murieron otras 22 personas.

SITUACIÓN EN TÚNEZ

Además, Obama trasladó a Mubarak su deseo de que Túnez pueda recuperar la calma tras las revueltas populares que han propiciado la dimisión del ya ex presidente Zine al Abidine Ben Alí y la formación de un Gobierno de unidad nacional que ha prometido iniciar el camino hacia la democracia.

Así, manifestó a Mubarak “el llamamiento que Estados Unidos ha hecho a la calma y al fin de la violencia, para que el Gobierno interino de Túnez pueda defender los Derechos Humanos y celebrar elecciones libres y limpias de acuerdo con las aspiraciones del pueblo tunecino”, recoge el comunicado divulgado por la Casa Blanca.

Los acontecimiento de Túnez han puesto de relieve la actuación represora de los gobiernos árabes de la región, caracterizados por los largos mandatos de sus dirigentes, en pro del mantenimiento de la seguridad y del orden público.

Mubarak, de 82 años, podría optar a la reelección en el que sería su sexto mandato, después de permanecer 30 años en el poder. No obstante, el Partido Nacional Democrático (NDP) se encuentra dividido entre aquellos que apoyan al presidente y los que prefieren una solución de continuidad a través de su hijo Gamal Mubarak.