“Aún no soy consciente de la magnitud de este proyecto, de lo importante que es y a las personas que voy a llegar”, así define Jesús Mosquera, en su entrevista para Vertele, los sentimientos que le ha provocado su rápido ascenso a la fama como protagonista de 'Toy Boy'.
Para llegar al papel, tuvo que pasar tres meses de casting y nueve de formación actoral, algo que supuso “un cambio radical en su vida”. A pesar de que ha conseguido cumplir su sueño, Mosquera no pensaba que fuera a ser actor de verdad: “Yo soy una persona muy tímida y nunca me había planteado luchar por ello, porque piensas que no es posible y no lo intentas”.
Lo más difícil para el protagonista ha sido la interpretación, aunque también ha remarcado que es complicado mantener la línea y la forma física adecuada de un bailarín. De todo el proceso, Mosquera ha sacado una lección en claro: “En rodaje, todos los días se aprenden millones de cosas”.
Tampoco duda cuando le preguntamos sobre si quiere continuar trabajando como actor: “Estoy muy feliz con el trabajo que estoy haciendo y mientras sea así voy a intentar seguir por este camino y mejorar día a día”. Tiene toda su confianza depositada en su primer proyecto y confía en las “tramas potentes” entre los personajes como baza principal de la serie de strippers de Antena 3.
El actor ha destacado también su buena relación con el resto del equipo al que considera ya como “una familia”. Ha remarcado, además, el vínculo que se ha formado entre él y María Pedraza: “Creo que la química que tenemos fuera de la grabación se va a transmitir en la serie”.