Canarias Ahora Opinión y blogs

Sobre este blog

Carta del presidente de Zeta

Tal y como estaba previsto, se celebró este miércoles en los juzgados de Santa Cruz de Tenerife la vista preliminar por la demanda de protección del honor interpuesta por José Rodríguez Ramírez, director-editor de El Día, contra el periodista Carlos E. Rodríguez. Fue una vista descafeinada porque el demandante no se personó en el acto, delegándolo todo en una joven letrada que se opuso a todo lo que pudo con tal de conseguir que prevalezcan los peregrinos argumentos de su patrocinado. La carrera de abogado es así, qué le vamos a hacer. Entre otras acciones, la letrada se opuso a que el tribunal aceptara como prueba una jugosa carta del que hoy es presidente del Grupo Zeta, Francisco Matosas, que era asesor jurídico de la empresa en aquellos tiempos en que se negoció la venta de El Día por 3.500 millones de pesetas. La carta, que fue incorporada finalmente por decisión del juez, explica con detalle cómo fueron las negociaciones y cómo aquella cena en el Mencey, con el cheque por delante.

Tal y como estaba previsto, se celebró este miércoles en los juzgados de Santa Cruz de Tenerife la vista preliminar por la demanda de protección del honor interpuesta por José Rodríguez Ramírez, director-editor de El Día, contra el periodista Carlos E. Rodríguez. Fue una vista descafeinada porque el demandante no se personó en el acto, delegándolo todo en una joven letrada que se opuso a todo lo que pudo con tal de conseguir que prevalezcan los peregrinos argumentos de su patrocinado. La carrera de abogado es así, qué le vamos a hacer. Entre otras acciones, la letrada se opuso a que el tribunal aceptara como prueba una jugosa carta del que hoy es presidente del Grupo Zeta, Francisco Matosas, que era asesor jurídico de la empresa en aquellos tiempos en que se negoció la venta de El Día por 3.500 millones de pesetas. La carta, que fue incorporada finalmente por decisión del juez, explica con detalle cómo fueron las negociaciones y cómo aquella cena en el Mencey, con el cheque por delante.