Canarias Ahora Opinión y blogs

Sobre este blog

La portada de mañana
Acceder
El gran dilema de Sánchez. Por Esther Palomera
De Vox a Manos Limpias: una década de querellas como arma política
OPINIÓN | 'España es una serie'. Por Antón Losada

180.000 euros en despidos

Proexca es una bomba de relojería, y no lo decimos por estos dispendios, que casi siempre han existido y seguirán existiendo forever, sino por que los modales con los que se está conduciendo su nueva consejera delegada, Cristina Reyes, no parecen ser los más adecuados. La doña ya ha despedido a tres trabajadores cuyas liquidaciones han costado 180.000 euros (esta vez, sin sobres) y dicen que hay otros cuatro en capilla con finiquitos millonarios derivados de la antigüedad en la empresa. Pero no es que haya política de reducción de plantilla, porque a las tres personas que se trajo consigo la consejera delegada hay que sumar otras dos que selecciona Edei, un técnico de administración financiera y un coordinador de área.

Proexca es una bomba de relojería, y no lo decimos por estos dispendios, que casi siempre han existido y seguirán existiendo forever, sino por que los modales con los que se está conduciendo su nueva consejera delegada, Cristina Reyes, no parecen ser los más adecuados. La doña ya ha despedido a tres trabajadores cuyas liquidaciones han costado 180.000 euros (esta vez, sin sobres) y dicen que hay otros cuatro en capilla con finiquitos millonarios derivados de la antigüedad en la empresa. Pero no es que haya política de reducción de plantilla, porque a las tres personas que se trajo consigo la consejera delegada hay que sumar otras dos que selecciona Edei, un técnico de administración financiera y un coordinador de área.