Joaquín Espinosa, insuperable anfitrión

Que un colegio profesional de la categoría del Colegio de Abogados de Las Palmas sea un enorme compendio de realidades, tendencias, gustos e ideologías es algo absolutamente asumido y muy normal, dada la composición igualmente heterogénea de la sociedad a la que sirve y su alto número de colegiados. Que desde hace tiempo se ha convertido en una institución para el debate plural, la discusión democrática, la docencia, la cultura y el entretenimiento, es algo que debe enorgullecer a todos sus colegiados. Este miércoles, el Colegio de Abogados volvió a dar una grandiosa lección de pluralidad al acoger en su salón de actos la reunión fundacional de la plataforma Otra Canarias es Posible, donde se ha juntado un amplio espectro de personas de muchas ideologías que, fundamentalmente, quieren cambiar los modos y maneras por los que transcurre el poder y sus satélites en Canarias. Como siempre, el decano, Joaquín Espinosa, prudente y entrañable anfitrión.

Que un colegio profesional de la categoría del Colegio de Abogados de Las Palmas sea un enorme compendio de realidades, tendencias, gustos e ideologías es algo absolutamente asumido y muy normal, dada la composición igualmente heterogénea de la sociedad a la que sirve y su alto número de colegiados. Que desde hace tiempo se ha convertido en una institución para el debate plural, la discusión democrática, la docencia, la cultura y el entretenimiento, es algo que debe enorgullecer a todos sus colegiados. Este miércoles, el Colegio de Abogados volvió a dar una grandiosa lección de pluralidad al acoger en su salón de actos la reunión fundacional de la plataforma Otra Canarias es Posible, donde se ha juntado un amplio espectro de personas de muchas ideologías que, fundamentalmente, quieren cambiar los modos y maneras por los que transcurre el poder y sus satélites en Canarias. Como siempre, el decano, Joaquín Espinosa, prudente y entrañable anfitrión.