Tras el primer despropósito, todos los demás

Y como todo lo que es susceptible de empeorar casi siempre termina empeorando, la situación de Aminatou Haidar ha ido complicándose a medida que han pasados los días y llega la solución diplomática. Los responsables de Aena en Lanzarote, empeñados en cerrar el aeropuerto a su hora, las doce de la noche, se vieron obligados a pedir a la Guardia Civil que desalojara a la activista y a sus acompañantes desde la primera noche, la del sábado. Y como quiera que el desalojo no se producía voluntariamente, los agentes han tenido que valerse de medios de la Cruz Roja (primero una silla de ruedas y luego una camilla fuertemente escoltada), para conseguir su propósito de poner fuera del edificio a la activista saharaui, que padece una enfermedad en la espalda que aún hace más penosa su situación. Fuentes oficiales aseguran que desde el primer momento se le invitó a que se trasladara a Gando, en Gran Canaria, o a Tenerife Sur a hacer efectiva allí su protesta, dado que esos aeropuertos no cierran nunca. Además, Gran Canaria tiene más vuelos a El Aaiúm que Lanzarote, lo que agilizaría el regreso de Aminatou. Pero en sus círculos cercanos niegan que existiera tal ofrecimiento.

Y como todo lo que es susceptible de empeorar casi siempre termina empeorando, la situación de Aminatou Haidar ha ido complicándose a medida que han pasados los días y llega la solución diplomática. Los responsables de Aena en Lanzarote, empeñados en cerrar el aeropuerto a su hora, las doce de la noche, se vieron obligados a pedir a la Guardia Civil que desalojara a la activista y a sus acompañantes desde la primera noche, la del sábado. Y como quiera que el desalojo no se producía voluntariamente, los agentes han tenido que valerse de medios de la Cruz Roja (primero una silla de ruedas y luego una camilla fuertemente escoltada), para conseguir su propósito de poner fuera del edificio a la activista saharaui, que padece una enfermedad en la espalda que aún hace más penosa su situación. Fuentes oficiales aseguran que desde el primer momento se le invitó a que se trasladara a Gando, en Gran Canaria, o a Tenerife Sur a hacer efectiva allí su protesta, dado que esos aeropuertos no cierran nunca. Además, Gran Canaria tiene más vuelos a El Aaiúm que Lanzarote, lo que agilizaría el regreso de Aminatou. Pero en sus círculos cercanos niegan que existiera tal ofrecimiento.