Parecen encantados los baloncestistas estadounidenses durante su mini estancia en Gran Canaria. Se le ha podido ver relajados, correteando en Playa del Inglés, entrenando en El Tablero, disfrutando de los lujos que les ofrece el exclusivo recinto hotelero, el Hotel Sheraton Salobre Golf, que los acoge en el sur grancanario, convertido estos días en un acorazado inaccesible. Y este martes, por fin, sobre la cancha del elegante Gran Canaria Arena. No es una presencia más la del Team USA (bien hicieron sus dirigentes en acabar con el término Dream Team) en nuestra isla, ni tampoco casual, por lo significativo que supone que el único partido preparatorio para la Copa del Mundo fuera de sus fronteras sea precisamente aquí. Es sin duda, el partido de baloncesto más importante jugado en suelo grancanario. No importa que sea amistoso, pues su repercusión es y será infinita, televisado también a nivel nacional en Estados Unidos. Sabedores de la expectación que generan, pasan los estadounidenses por ser los mejores especialistas en vender su producto, de ahí las facilidades que ofrecieron este lunes a todos los medios de comunicación que acudieron a su entrenamiento matinal. Ojalá cundiera el ejemplo muy cerca de aquí...
Se presenta la selección norteamericana a esta Copa del Mundo como aspirante al oro con la única oposición a priori de España, tan igualados como están los pronósticos tras las renuncias de LeBron James, Kobe Bryant, Kevin Durant, Carmelo Anthony, Chris Paul, Dwight Howard, Russel Westbrook, Blake Griffin, Kevin Love, LaMarcus Aldridge, la escalofriante lesión de Paul George... Sin embargo, no deja de ser una selección temible gracias a la presencia de James Harden y Stephen Curry, “los líderes de este equipo”, tal y como los definió su entrenador, Mike Krzyzewski. Anthony Davis se presenta como el único bastión de plenas garantías para completar el martillo pilón que supone el cuarteto interior de España (los Gasol, Ibaka y Reyes), por lo que Coach K tuvo que recurrir al músculo de Cousins o Faried.
Ocurre por tanto que el juego exterior es lo mejor que tiene el equipo de Estados Unidos pese a las sonadas ausencias en esas posiciones. Así, a los ya mencionados Harden y Curry, tirador elegante donde los haya, se suma el base Kirie Irving, integrante del nuevo Big Three de la NBA junto a James y Love en los Cleveland Cavaliers. Una incógnita parece la presencia de otro base como Derrick Rose, de los Chicago Bulls, el MVP más bajo de la historia de la NBA, tras casi dos años parado por lesiones de rodilla. Dicen testigos presenciales de la preparación estadounidense que está a su mejor nivel, por lo que automáticamente se multiplican las opciones de éxito americanas. Precisamente es aquí donde más problemas pueden generar a sus rivales, con los aleros Rudy Gay y Klay Thompson al acecho.
Por cierto, el rival para este partido es Eslovenia, tan poco es el interés que despierta el rival de USA. Se presenta en la isla liderada por los hermanos Dragic, Goran y Zoran, uno en Phoenix y otro en Málaga. No podrá contar la selección balcánica con el pívot del Barcelona Erazem Lorbek, lesionado de gravedad. No estará tampoco su compañero y alapívot Nachbar y sí Uros Slokar, quien militara en el Herbalife Gran Canaria hace dos temporadas. Los eslovenos disputarán sus partidos de grupo de esta Copa del Mundo junto a Lituania, Australia, Corea del Sur, Méjico y Angola precisamente en Gran Canaria, donde el planeta basket se detiene hoy.