El presidente de Antena 3, José Manuel Lara Bosch, ha declarado el viernes en Málaga que “entiende” que la forma de despedir a los trabajadores de la cadena de televisión haya sido “criticable y dolorosa” y achacó la “situación de tensión” creada a una “falta de comunicación”. Lara Bosch apuntó, a preguntas de los periodistas, que estas formas “habrían sido más injustas” si “hubiéramos hecho distingos entre personas”, porque “el derecho a un despido humano lo tienen todos”, y habría sido “indigno que fuera distinto el despido de Rosa María Mateo que el del último o el que menos cobra”. Explicó que Antena 3 recibió la decisión del Ministerio de Trabajo el pasado viernes a última hora de la tarde, y por eso decidió comunicar los despidos “por burofax”, un método “muy desagradable, pero el más acertado, justo y oportuno para no crear otro conflicto de orden público”. “Nos importaba más ponernos una vez colorados que muchas amarillos, para después reconstruir la relación laboral que una empresa necesita», y «la previsión más lógica era que si esperábamos al lunes para despedir a la gente individualmente dentro de la empresa podíamos encontrarnos que no quisieran salir de allí”. Ello llevaría “a una situación tensa y violenta de 215 personas despedidas que se encierran en el lugar de trabajo y a las que, por principios de disciplina empresarial, no puedes admitir”, afirmó. Añadió que no conoce “ningún sistema para prescindir de los trabajadores, si no es con un acuerdo, que no sea malo”, puesto que los despidos producen “una esquizofrenia de doble personalidad, ya que como profesional, crees que es necesario, pero como persona, entiendes el problema de la otra persona”. No ha habido comunicación entre los trabajadores y la cadena Según el responsable de la cadena, “una serie de problemas de incomunicación nos han llevado a una situación que era obviable si nos hubiéramos sabido comunicar mejor la empresa con los trabajadores, y al final han salido peor los trabajadores de lo que habrían salido con una comunicación fluida”. “Cosas que nos importaban mucho se han quedado fuera por no saber comunicarnos, como compromisos de estabilidad laboral, bolsas de trabajo o bajas voluntarias, por culpa de tener que llegar a un arbitraje”, subrayó. Afirmó que la necesidad de una “reestructuración del personal era obvia” y que “a partir de ahí, estábamos dispuestos a racionalizarla a tope con los trabajadores, pero no hemos conseguido conversaciones reales en ningún momento”. Lara criticó la actitud del Comité de Empresa señalando “que ante un planteamiento de 45 días te contesten con ochenta días y 24.000 euros por cabeza no es real, ni es tampoco una base para sentarse en la mesa”. El Presidente de Antena 3 calificó la situación como “un gran fracaso de todos, en el que no me excluyo como presidente, al no saber encontrar un mecanismo de diálogo y provocar que un tercero tome las decisiones”. La lista fue elaborada por los responsables de los departamentos de la cadena Preguntado sobre la posibilidad de que el cese del periodista Carlos Hernández se debiera a haber portado una pegatina contra los despidos, aseguró que “las 215 personas estaban en la primera lista que vi en julio, en la que no se incluyó ninguna persona después, y lo de la pegatina fue posterior”. Precisó que la lista fue elaborada por los responsables de los departamentos de la cadena, y “si alguien de tercer nivel de mando ha hecho una venganza personal, yo no lo puedo saber”, señaló. “La televisión no debe contribuir a bajar el nivel cultural de un país” Sobre la estrategia empresarial de Antena 3, explicó que será “la cabecera de un grupo de comunicación importante y una televisión familiar”, y opinó que el medio televisivo “no puede cambiar el nivel cultural de un país, pero tampoco tiene necesidad de contribuir a bajarlo”. Apuntó que, desde que controlan la cadena, «el único programa nuevo significativo» es la serie “Aquí no hay quien viva”, que está alcanzando una audiencia del 35 por ciento y “no puede ser acusada de telebasura”, puesto que se trata “de una serie familiar con estereotipos de la gente real en sociedad actual”. Antena 3 TV pierde dinero Antena 3 Televisión registró unas pérdidas entre enero y septiembre de este año de 106,43 millones de euros, lo que supone un 117 por ciento más que los 48,88 millones de déficit del mismo periodo del año pasado. Según datos facilitados hoy por este grupo a la CNMV, los ingresos netos de Antena 3 TV ascendieron a 370,24 millones de euros, lo que supone un 0,8 por ciento menos que en el mismo periodo de 2002. La compañía atribuye en su análisis este descenso a la “disminución de la audiencia”, un 19,7 por ciento un punto inferior a la del año anterior. No obstante, la mejor evolución en el tercer trimestre ha permitido un incremento de ingresos en ese periodo sobre el año pasado. Por otra parte, los gastos de explotación acumulados fueron de 310,6 millones de euros, con una reducción del 16,6 por ciento, debido al efecto el año pasado de los elevados gastos derivados de la retransmisión del Mundial de fútbol de 2002, aunque ha habido ahorros adicionales en el tercer trimestre. El resultado operativo acumulado a 30 de septiembre alcanza los 59,6 millones de euros, frente a los 0,9 millones de 2002, consecuencia directa de la reducción de gastos de explotación. En cuanto a los resultados extraordinarios, ascienden a 181,83 millones de euros (un 185 por ciento más), que corresponden fundamentalmente a que durante el primer semestre de 2003 la compañía registró una provisión por depreciación de existencias de 101,4 millones de euros, que corrige el valor de los derechos de programas de producción propia y ajena.