Momo y Vitolo calman las aguas revueltas

El vestuario de la Unión Deportiva Las Palmas está revuelto. Tras las duras declaraciones de Mariano Barbosa, en las que acusaba a algunos de sus compañeros de tener una actitud “pasota” y después de haber disputado uno de los peores encuentros que se le ha podido ver a los amarillos en el Gran Canaria, el cancerbero argentino tuvo un altercado con Sergio Suárez en los vestuarios que tuvo que ser mitigado por sus compañeros. Fruto de ello, el equipo efectuó un entrenamiento que no estaba previsto el domingo, en el que Juan Manuel tuvo una reunión con sus jugadores para enderezar la situación.

“Fue una charla muy positiva en todos los sentidos”, aseguró Momo, quien afirma que tal reunión tuvo el propósito de “dar ánimos tras unas semanas complicadas en las que el equipo no estuvo bien. Vitolo daba un paso más allá y afirmaba que este tipo de charlas ”son normales a lo largo de la temporada“, pidiendo expresamente que no se dramaticen las cosas.

Sobre el incidente entre sus compañeros, Momo asevera que “son cosas que pasan en el fútbol”, añadiendo que ambos jugadores ya se han pedido disculpas y “está todo solucionado”. Además, ofrecía su opinión sobre las críticas palabras de Barbosa, no dudando de la intención motivadora que encerraba el argentino al expresarlas aunque reconocó que opina que se equivocó en algunas de ellas.

El pasado sábado, el equipo se llevó una sonora pitada durante y al final del desastroso encuentro ante el Huesca, en el que pasaron de tener una inmejorable oportunidad de penalti para poner el 2-0 en el marcador a acabar cayendo derrotados por 1-3. Vitolo, emulando a Sergio Suárez tras el encuentro de la semana pasada ante el Xerez, reconocía la mala imagen que dio el club y pedía perdón a la afición por ello. Momo también hacía autocrítica al respecto: “Tenemos que recapacitar y hacer las cosas para que eso no vuelva a ocurrir”, concluyó el de las Torres.