Habemus nuevo alcalde en La Guancha, en el norte de Tenerife, y no es el que pretendía el mandatario recientemente dimitido. Antonio Hernández (PP) anunció el pasado 27 de mayo que renunciaba al bastón de mando tras diez años en el cargo (en los dos últimos mandatos, gracias al apoyo del PSOE, lo que puede sorprender a otras escalas). Lo hacía por motivos personales nunca explicados, aunque en el municipio se han disparado los rumores y especulaciones, y pretendía ser sustituido por su segunda teniente de Alcalde, la también conservadora Lorena Socas, pero había una X en la ecuación que no estaba clara y que, al final, ha girado en favor de CC tras un decenio en la oposición, devolviéndole la Alcaldía y el gobierno.
Para producirse el cambio buscado por Hernández en el pleno convocado para la mañana de este martes, con un salón con media entrada (lo que sí sorprendió), todos los ediles del PP debían volver a sumar sus votos a la única representante socialista y primera teniente de Alcalde, María José García, en favor de la elegida, pero eso no cuadraba si a la edil destituida a finales de febrero por el alcalde, su compañera de partido María Auxiliadora Marrero, le daba por “vengarse” con un simple voto afirmativo al candidato de CC, Alejandro Herrera, que empató a seis actas en mayo de 2023 con los populares. Y hete aquí que sí, que Némesis, la diosa de la venganza en la mitología griega, se hizo presente esta mañana en este pueblo frío pero intenso, coqueto y con excelentes vistas al Teide desde la medianía del norte tinerfeño, aunque cuenta con costa y barrios bajos.
CC recupera una Alcaldía perdida en 2015 tras el, entonces, sorprendente (visto desde fuera) pacto de PP (cinco ediles) y PSOE (dos) que hizo alcalde a Hernández. El joven enfermero Herrera se convierte en alcalde cuando cobraba cada vez más fuerza que ni siquiera quería repetir como candidato nacionalista en 2027, y así lo dejó entrever en parte en su intervención, ya con el bastón de mando al lado.
Así, el tablero político guanchero vuelve a ser paradójico y distópico si se atiende a la situación nacional, con un PP llamando “mafia” al PSOE, una CC que cogobierna con los populares en el Ejecutivo regional y el Cabildo de Tenerife, así como otros numerosos municipios de las Islas, y una edil socialista local que, como en su momento el partido en La Palma, ahora en Arico o hasta hace poco en Granadilla, se queda mirando para el aire tras apostar por el PP, que en municipios como este último o en Arona ha acabado cogestionando junto a CC y la ultraderecha de Vox. Desde luego, y como admitía Pedro Sánchez cada vez que acudía a La Palma por el volcán en el mandato anterior, la política en Canarias es muy rara y difícil de explicar en otras latitudes, aunque la de La Guancha, desde hoy, retuerce un poco más esa aseveración.
Ya desde que se votó si la elección de hoy era nominal, a mano alzada o secreta, la concejal clave se situó junto a los nacionalistas, que optaron por la última posibilidad. El recuento de lo votado confirmó el giro de gobierno con algunos dirigentes del PP de testigos y dando por hecho desde el principio esta pérdida de una Alcaldia, como la exmandataria de Güímar Luisi Castro o el consejero insular Manuel Fernández. Por si acaso, Herrera había preparado dos discursos, pero al final leyó el de nuevo alcalde guanchero.
Y es que la jugada parecía cantada. Hernández destituyó a la concejal Marrero por pérdida de confianza tras 18 meses de ausencia por baja temporal, manteniéndose en el grupo popular, pero sin competencias y sin volver a pisar el salón plenario desde entonces, con lo que ni siquiera pudo pasarse al grupo mixto y evitar que se le acuse de tránsfuga desde ahora y el PP acuda a esa vía para intentar revertir lo ocurrido hoy. Por tanto, hasta un estudiante medio y de pocos años de este municipio con mucha fama educativa por el prestigio de su instituto podía adivinar, temer, barruntar u olerse que la edil despechada podría aparecer en el pleno de hoy, que comenzó a las 9:00 horas, y revolucionar la política local hasta los próximos comicios. No hay que hacer muchas carreras ni ir a Harvard para contemplar un escenario así, dado que a CC le bastaba con un simple apoyo para volver al gobierno.
Renuncia con muchas aristas e interpretaciones
De ahí que pocos entiendan la renuncia de Hernández y que el PP se viera abocado a esta encrucijada con tantos riesgos, salvo que, en el fondo y un poco retorcidamente, fuera lo que buscaba Hernández y parte de un partido local que es consciente de las dificultades para renovar la suficiente confianza de los vecinos en 2027 como para seguir en el poder, por mucho que pudiera seguir apoyándose en un PSOE cada vez más raquítico e irreconocible en comparación con aquellas mayorías absolutas aplastantes o muy solventes de los tiempos de José Bernardo Grillo (durante 20 años, de 1979 a 1999), que dio paso luego a diversos gobiernos en solitario de CC, sobre todo de la mano de Elena Luis, exdiputada regional defenestrada por Fernando Clavijo en la lista electoral de 2019 pese a ser clave en la elaboración y aprobación de la nueva ley de Servicios Sociales.
Lo cierto es que la votación de hoy, con 7 votos a favor de Herrera y 6 de Socas, ha girado políticamente un municipio que ya ha pasado por alcaldes o alcaldesas (la otra fue Araceli Socas, de CC, de enero de 2015 a mayo de ese año tras la renuncia de Luis) de los tres principales partidos de Canarias: PSOE, luego CC con dos mujeres, el PP de Hernández y, desde esta mañana, de nuevo los nacionalistas, aunque ya con mandatario masculino.
También es cierto que, tras la renuncia del alcalde del pasado 27 de mayo, los rumores y críticas (incluso con escritos anónimos que han circulado mucho por el pueblo en las últimas semanas sobre las verdaderas razones de Hernández, sobre si no sentía respaldo del resto de administraciones ni de su partido, así como por una gestión que, aunque él defiende, otros consideran simplemente “nefasta”). Esto ha ido calentando y preparando el ambiente hasta el giro de esta mañana, que aunque puede sorprender desde fuera y revoluciona la gestión local, no ha sobresaltado en exceso a muchos guancheros y guancheras bien informados. Por supuesto, las intervenciones del PP y la edil del PSOE en el pleno de hoy discrepan de esa lectura, pero la de CC la reforzó.