Y ahora Sonsoles preparó para Nochebuena un momento de lo más especial, con el reencuentro ante las cámaras de Antena 3 de dos personajes muy queridos que marcaron a toda una generación. Sonsoles Ónega aprovechó su entrevista a Rody Aragón, quien acudió al programa para hablar de su trayectoria vital y profesional, para sorprenderle con la entrada en plató de Fofito.
“¿Cómo están ustedes?”, exclamó desde el backstage el artista, desatando las lágrimas de emoción de Rody. Enseguida, tras su entrada en el estudio, ambos se fundieron en un sentido abrazo. “¡Está llorando!”, destacó Fofito, también emocionado.
Tras años sin compartir escenario, los hermanos se volvieron a juntar delante de los espectadores, recordando como eran las Navidades junto a Los Payasos de la Tele y protagonizando un momento de suma nostalgia. “Yo he tenido la suerte de trabajar con mi familia. Rody haciéndome de serio; con mi hija Mónica en teatro y circo, con ella educándome en la pista...”, empezó relatando el payaso.
“Es incombustible este hombre. Toda la familia hemos estado detrás para ver si descansa y no quiere”, comentó Aragón, preguntado por Sonsoles Ónega sobre si les daba miedo las comparaciones con la generación anterior de su familia. “Siempre las ha habido. Es un peso en la espalda, que es el apellido Aragón”, reconoció Fofito.
“Mi papá tenia muy claro quién era, era el eje de la familia, pero hacia nosotros tenía claro que podíamos llegar muy lejos y nos lo transmitía. Dentro de la familia sabemos quién es quién”, dijo Rody sobre su padre, el payaso Fofó. “En la opinión general de todos, Fofó era el alma”, concluyó el humorista.