Impulsa TDT reclama al Gobierno “que cumpla los plazos”
El presidente de la Asociación para la implantación y el desarrollo de la Televisión Digital Terrestre en España, Jaime Castellanos, pidió hoy al Gobierno que lleve a cabo el plan de transición para la implantación de la nueva tecnología en España, ya que, recordó, “quedan menos de 1.000 días” para cumplir con el plazo previsto para el 'apagón analógico', fijado en abril de 2010.
El pasado martes, el secretario de estado para la Sociedad de la Información, Francisco Ros, adelantó que el Gobierno y las comunidades autónomas ya trabajan en un plan para adelantar la sustitución de la señal analógica de televisión por demarcaciones.
En su comparecencia en la Comisión de la Sociedad de la Información y el Conocimiento, Castellanos pidió al Gobierno que “cumpla con las declaraciones” y aseguró que, de ser así, “no hay duda de que se podrán cumplir los plazos”.
El presidente de la asociación, que agrupa a los operadores de televisión públicos (autonómicos y el nacional, RTVE) y privados de cobertura nacional, dijo que es “importantísimo” cumplir con nuevos plazos de forma inmediata, para llegar a la fecha prevista del cese de emisiones analógicas.
“Lo que no puede hacerse es seguir demorando los plazos, como ocurre con el proyecto de apagón en Soria, que afecta sólo a 40.000 personas y tiene los fondos aprobados por el Consejo de Ministros, pero no se ven más que retrasos”, dijo Castellanos, que reveló haber dirigido una carta a la Secretaría de Estado el mes pasado, transmitiendo su “preocupación” por los plazos de tiempo. “Podemos hacer las declaraciones y los anuncios que queramos, que si no se cumplen, no lo vamos a conseguir porque lo tenemos muy difícil”, añadió.
“Consumidores engañados”
En cuanto a las medidas necesarias para favorecer el cambio de la tecnología, Castellanos reclamó la aprobación de un Plan Renove de televisores, como ya hicieran las cadenas privadas agrupadas en Uteca, que además fuera acompañado de una regulación restrictiva para la venta de televisores no adaptados para recibir la TDT.
“En Francia está prohibida la venta de televisores no adaptados y en España estamos sufriendo la limpieza de los almacenes franceses”, señaló Castellanos, que alertó de que “muchos consumidores pronto se van a sentir engañados”.
“Hoy se venden en España televisores analógicos, que normalmente tienen una vida de diez años, pero los consumidores van a ver que dentro de tres años ya no les sirven”, razón por la que pronosticó que en ese plazo “habrá protestas ante la administración por la falta de información al consumidor”.
Castellanos situó la información al consumidor como uno de los aspectos principales sobre los que actuar, y reveló que su asociación ha intentado llegar a un acuerdo con los fabricantes para que cesen la venta de aparatos no preparados, pero que “no lo han conseguido”.
“Sólo la Administración tiene fuerza para lograr un acuerdo así”. “Hemos abogado por prohibir la venta de televisiones analógicas, pero desde el Ministerio de Industria nos han dicho que lo que ha hecho Francia no se puede hacer porque la Unión Europea lo prohíbe”, explicó.
“Por ello, el Plan Renove sería una oportunidad única y asumible” tanto en sus aspectos legales como de coste para las arcas públicas. Como ejemplo, indicó que para el proyecto de apagón de Soria, del que se beneficiarán 40.000 habitantes, has destinados 2 millones de euros de presupuesto. “Si extrapolamos, las cifras son inasumibles”, dijo.
Entre las “dificultades” del proceso de transición, Castellanos también mencionó la llegada de dos nuevos canales en analógico (Cuatro y la Sexta), cadenas con “intereses absolutamente contrapuestos” con las nuevas cadenas digitales en la implantación de la TDT.
“No son grandes impulsores de lo digital, porque eso supone más canales, y más canales es más competencia”, dijo. Acerca de las nuevas concesiones, admitió que, “donde antes había dos cadenas que remaban en sentido contrario (en alusión a Antena 3 y Telecinco), ahora hay cuatro”.
Respaldo político
En términos de respaldo político, castellanos agradeció la implicación de la vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, que “ha asumido personalmente el liderazgo de este proyecto aunque otros miembros del Gobierno no crean en él”.
En contraste, puso de ejemplo la gestión de Ministerio de Industria, “paralizado completamente” tras la salida de José Montilla y la llegada de su actual titular, Joan Clos. “Fui una vez a hablar con Clos sobre la TDT y me miró como si le hablara de Objetos Voladores No Identificados”, bromeó Castellanos, que sí mencionó el interés “más reciente” de la Secretaría de Estado de las Telecomunicaciones, ocupada por Francisco Ros.
En esta línea, exigió a la Administración que “asuma el liderazgo” en las medidas mencionadas anteriormente. “El esfuerzo debe hacerlo la Administración, porque el cambio de la tecnología es una decisión política”, indicó castellanos. “Nosotros le hemos puesto al Gobierno el ejemplo del Reino Unido, donde se han aprobado ayudas por valor de 1.172 millones de euros, o el de Francia, con más de 800 millones, y el de Italia, con 437 millones de euros”. “Es necesario asumir la complejidad del proceso”, que depende de la coordinación de muchos actores y del liderazgo de la Administración, concluyó.