Las Palmas remonta a base de golazos

La UD Las Palmas remonta un partido que se puso en contra desde el minuto 20, con un gol de Santi Mina. Pero Viera antes del descanso, con un disparo exquisito desde fuera del área ponía y el empate y Lemos, después de haber sido expulsado Munir por doble amonestación, puso el 2 a 1 con un impresionante testarazo a la escuadra derecha de Diego Alves.

Kevin Prince-Boateng, de los mejores de los suyos, coronaría su gran actuación con el 3 a 1, poniendo la guinda a la remontada amarilla.

Sorprendía Setién con el once inicial, poniendo junto a Montoro, Roque y Vicente, probablemente buscando cerrar los espacios de los que advirtió el preparador cántabro que el Valencia sabía sacar partido.

Los amarillos conseguían su primera internada al área en el minuto 3 gracias a Boateng, jugando como único delantero y media punta a la vez, que metía un pase en profundidad a Macedo, quien tardó en ejecutar el centro y se va a corner.

Pero sería un espejismo, ya que durante el primer cuarto de hora la mayoría del juego se desarrolló en el campo de Las Palmas, que con mimo y paciencia, trataba de avanzar ante la intensa presión del Valencia, colocado sobre el campo cubriendo muy bien los espacios, sin dejar resquicios para el avance amarillo.

La idea de 'Voro' era clara: robar el balón y salir disparado hacia la portería de Javi Varas, algo que dio sus frutos en el minuto 20. La jugada se fraguó en el flanco derecho de los locales, con Momo perdiendo su marca y dejando a Macedo 'vendido' ante la subida de Gayá, que recibía un pase por alto y, ganando la espalda al lateral brasileño, la ponía rasa para que Santi Mina sumara el 0 a 1 al marcador.

A partir de ahí llegaron los mejores minutos del conjunto 'ché', que conectaba combinaciones por todo el campo ante la impotencia de la UD, que trataba de levantarse del inesperado golpe.

Los visitantes encontraron el punto débil local: su banda derecha. Gracias un gran Gayá y a un Momo muy poco comprometido en las ayudas defensivas, pero poco a poco la pelota volvería a teñirse de amarilla y Las Palmas retomaría el mando del partido.

Con la primera media hora cumplida, precisamente desde el lado defensivo débil, llegaba un balón colgado al área que la defensa valencianista se comía y que Boateng, en un remate aéreo, no conseguía encauzar a portería.

Poco después la reacción amarilla se consolidaba con una clara ocasión de Vicente, que, con el balón en sus pies en el área, tardaba demasiado en armar el tiro y se iba a corner.

Las sensaciones eran buenas y así lo hacía notar el público del Gran Canaria, que veía cómo el árbitro, demasiado permisivo, dejaba pasar algunas acciones a favor de los suyos. 

Cuando llegaba el descanso, esas sensaciones se tornaron en hechos. Boateng, el mejor de los amarillos en la primera mitad, controlaba un balón de espaldas a la portería en la frontal del área y se la cedía a Viera, quien, con un metro de espacio para preparar el tiro, disparaba con su pierna derecha un remate precioso que batía a Alves en su lado derecho.

Voro decidía quitar a Enzo Pérez (con amarilla) por Mario Suárez en la reanudación, para no arriesgar en su defensa, una jugada que se truncaría en tres minutos, cuando Munir vio dos amarillas en ese intervalo. Primero por derribar a Dani Castellano en un contraataque y después a Pedro Bigas, vería la roja en el 51'.

Jugando con superioridad Las Palmas tuvo la primera merodeando el área del Valencia de un lado a otro, buscando al puerta de entrada hasta que Macedo lo intentó sin éxito, tirando por encima del larguero.

El Valencia se reestructuró con dos líneas de cuatro y Mina descolgado, y a pesar de la inferioridad numérica no dejaron de seguir el guión marcado: presión para robar y salir rápido.

Las Palmas no se confiaba y con calma siguió tocando, hasta que Jonathan Viera forzó una falta. Lemos, en el 57', disparaba un misil que entraba por la escuadra derecha de Alves, que poco pudo hacer ante el testarazo del urguayo.

Con el 2 a 1 en contra y con uno menos al Valencia se le ponía muy cuesta arriba, consciente de la dificultad de sacar un resultado positivo dadas las circunstancias. Para los visitantes la situación se agravó tras un enorme error de Mangala, que fallaba al marcar en el área a Boateng, dejándolo solo para poner el 3 a 1 en el 61' y rematar a un Valencia herido, pero no muerto.

De hecho, con una actitud encomiable, los de Voro se vinieron arriba, poniendo en aprietos a la zaga amarilla. Desde el tercer gol los locales entraron en otra fase y encararon el encuentro con otra intensidad, siendo lo más destacable el debut de Alen Halilovic en el 72', entrando por Momo y realizando una actuación discreta.

El marcador no se movió cuando el árbitro pitó el final y con esta nueva victoria la UD Las Palmas refuerza su condición de invicto en casa en el inicio de la segunda vuelta.