El Registro de la Propiedad estudia ceder en préstamo a La Cosmológica documentos del siglo XVIII
El Registro de la Propiedad y Mercantil de Santa Cruz de La Palma estudia ceder en préstamo a la Sociedad Cosmológica libros de registro de relevancia histórica, que se remontan hasta el año 1700, a través de los cuales se puede trazar casi el perfil de los propietarios de las fincas inscritas, según ha señalado a LA PALMA AHORA Francisco Palacios Criado, registrador de la propiedad, que ha visitado la centenaria institución capitalina en compañía de su presidente, Carlos Lugo. “Tenemos en el Registro de la Propiedad disposiciones, reales decretos, que nos dicen muy claramente que estos documentos tienen que ir al Archivo Histórico Provincial, aunque se puede estudiar el préstamo a una sociedad cultural como La Cosmológica y me comprometo a consultar este tema con las autoridades competentes”, ha precisado.
Los registros, explicó Palacio Criados, recogen “la historia de la finca, y a través de ella, se puede conocer la historia de las personas: además de dónde vivían, casi cómo vivían y a qué negocio se dedicaban”. Con la ayuda de esta documentación, subrayó, “es posible hacer trabajos bastante interesantes sobre familias y empresas que den un poco de luz sobre de dónde venimos y hacia dónde vamos”. El contenido de los libros del Registro cuya antigüedad le da un valor histórico “se puede combinar de una forma muy armónica con el desarrollo de las nuevas tecnologías, como ocurre en La Cosmológica, donde se plasma ese contenido en papel en formato digital”, dijo. “Esto permite divulgar su conocimiento por la vía telemática, porque yo siempre digo que uno de los elementos más importantes para la democratización de los países es internet, porque permite a todo el mundo tener información actual sobre lo que está ocurriendo en cualquier parte del mundo”.
Francisco Palacios, un hombre de vasta cultura especializado en historia de Latinoamérica, se quedó gratamente sorprendido con el legado que alberga la señera sociedad. “Creía que era una institución más modesta -aunque ser modesto no significa de inferior calidad, puede ser incluso superior- pero me he encontrado no solo con un edificio muy bonito, de enormes dimensiones, sino también con la recuperación de un patrimonio cultural de siglos de bastante calidad, y eso hace resaltar el profundo sentido humanista de las personas que han vivido y viven en La Palma”, destacó. “Ese humanismo es el que colabora muchas veces no solo en la convivencia sino en las instituciones, a nivel político, social y económico, y eso es importante para cualquier tipo de sociedad”, añadió.
Palacios, natural de Córdoba, es un apasionado, además de su profesión, de la cultura. “Siempre he tenido afán por saber, por conocer, aprender, colaborar, cooperar, transmitir conocimientos, porque las personas somos más ricas cuanto más aprendemos y cuanto más capaces seamos de transmitir lo poco o lo mucho que sabemos; una intercomunicación entre lo que sabe el otro y lo que sé yo permite tener una mayor perspectiva y dimensión de las cosas”, sostiene. “Siempre me ha gustado leer, estar bien informado, conocer mi entorno, mi circunstancia, y eso no solo te ayuda a ser más libre, que es muy importante, sino también más responsable”. Este registrador de la Propiedad es también un aficionado “al deporte, a la vida sana, a relacionarme socialmente, y a estar con mi familia, especialmente con mi hijo, a quien procuro transmitirle valores positivos”.
A lo largo de su vida profesional ha tenido que realizar más de 40 viajes a Latinoamérica “y eso me ha obligado a estudiar la historia y la cultura de muchos países”. Próximamente tiene previsto desplazarse a Chile. “He procurado cultivarme a través de un proyecto en el que llevo trabajando mucho tiempo, un blog compartido con el Colegio de Registradores de España, que se llama CADRI (Curso Anual de Derecho Registral Iberoamericano), pero yo también digo que las siglas CADRI significan compartir, animar, dar, recibir e ilusionar, y eso me ha hecho que escriba todos los días un poquito de poesía, de temas culturales, de historia, con lo que mantengo la mente despierta, ágil y siempre preparado para conocer y saber algo más sobre el mundo en que vivimos, porque eso, insisto, te hace más libre, más responsable y te ayuda a disfrutar más de las cosas conocerlas mejor”, apunta.
En el libro de visitas de La Cosmológica, Palacios Criado escribió: “Gratitud por vuestra bienvenida y gratitud por la importante labor de protección y divulgación de un considerable patrimonio cultural”. También conoció el ‘Protocolo de la Santa Mueca’, una edición de María Régulo con prólogo de su padre, el ilustre filólogo garafiano Juan Régulo, que transcribe unos manuscritos del siglo XIX en los que se recogen las bromas que gastaban los palmeros a los foráneos que llegaban a La Palma con ínfulas de grandeza y mirando a los lugareños por encima del hombro.
Jornadas históricas
En otro orden de cosas, Francisco Palacios será el encargado de proseguir con la organización de las jornadas históricas que impulsó en la Isla en coronel Juan López y que se celebraban en el acuartelamiento El Fuerte de Breña Baja. “Voy a intentar coger el testigo de un auténtico corredor de alta velocidad, que me ha dejado un reto importante y que intentaré llevarlo a cabo lo mejor posible”, manifestó al respecto. “No se puede conservar su formato porque se desarrollaban en el acuartelamiento militar, que ahora tiene solo carácter de residencia”, recordó. Las jornadas se trasladarán en su próxima edición, que se presentará el 21 de noviembre, a la sede social del Club Náutico de Santa Cruz de La Palma, pero Palacios aboga por su descentralización. “Queremos celebrar estas tertulias en otras sedes, como La Cosmológica, y hacerlas más abiertas, llevarlas incluso a otros municipios”, resaltó.
En estas jornadas históricas, detalló, “se aprende sobre la vida de otros personas, sobre cultura, historia, y mi intención ahora es que tengan un objetivo muy definido y muy claro: darle importancia a la biología, a la geología, a la historia, incluso a la forma de entender la vida de Santa Cruz de La Palma, porque considero que los palmeros tienen la legitimidad y el derecho a saber un poquito más de su propia historia y de la formación de su propia Isla”. “No olvidemos que Santa Cruz de La Palma, en la época de las rutas comerciales con América, fue el tercer puerto junto con Amberes y Sevilla y por aquí han pasado personajes muy importantes, y ese pasado hay que rescatarlo”, concluyó.
