Madre sí hay más que una en el nuevo docu-reality de Telecinco
Telecinco estrena este domingo -después de “La pecera de Eva”- a las 22:45 horas "Me cambio de familia", una nueva adaptación española del exitoso docu-reality británico “Wife Swap”.
Producido por Big Bang Media (“De buena ley”), su premisa es la de intercambiar la madre con una familia desconocida y convivir durante dos semanas con una nueva “señora de la casa”.
Las protagonistas de 'Me cambio de familia', a cuyo casting se presentaron casi 8.000 aspirantes, son dos madres trabajadoras que tienen un modo muy distinto de ver la vida y un rasgo en común: ambas creen que siempre tiene la razón.
Así, ambas deberán ahora intercambiar su vida con la pretensión de imponer sus propias normas en sus nuevas familias, lo que podrá generar todo tipo de conflictos.
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Absolutamente opuestas y férreas convicciones sobre la educación
Los dos madres de familia que van a sustituirse tienen un perfil muy concreto: son absolutamente opuestas y tienen férreas convicciones sobre la educación de sus hijos, sobre la posición de la mujer en la sociedad e ideas muy claras sobre la división de los roles tanto en el hogar como en el trabajo.
Piensan que su filosofía de vida y su manera de organizar el hogar son las mejores posibles y que nadie lo hace mejor que ellas, aunque vengan de mundos contrarios. Si una es muy ordenada, la otra será caótica; si una es alocada; la otra será estricta, por lo que su intercambio puede suponer un verdadero trastorno en el seno de sus familias.
Instrucciones que puede que no les sienten demasiado bien
La primera parte será la de la presentación de las familias en su propio hábitat. De cada una, se mostrarán los cuatro o cinco puntos más característicos que chocan con los de la otra. Así, el espectador podrá hacerse una idea de cuáles serán los conflictos posteriores.
Una vez conocido el contexto, las mujeres se despedirán de sus familiares y se trasladarán a sus nuevos hogares donde podrán hacer una primera inspección, en solitario, para estudiar a fondo los detalles de la casa si está limpia o sucia, cómo es la decoración, las fotos de la familia, etc).
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Allí, recibirán unas instrucciones que puede que no les sienten demasiado bien: por ejemplo, la mujer saliente le dejará la cena preparada a la que entra junto con una nota de la lista de la compra que debe hacer durante su ausencia. Tras este recibimiento, conocerán a los que serán sus acompañantes durante dos semanas.
Salen a la luz los trapos sucios de cada familia
En ese período, podremos ver cómo será su convivencia y esta es la parte central del programa. Iremos viendo cómo surgen los primeros conflictos y roces y cómo salen a la luz los trapos sucios de cada familia.
El núcleo de los problemas girará en torno al propio carácter de la nueva mujer que dirige la casa, ya que, para bien o para mal, su concepción de cómo deben hacerse las cosas será totalmente distinto a lo que estaba establecido hasta el momento. Como en todo buen reality que se precie, habrá un confesionario donde todospodrán expresar sus impresiones sobre el día a día.
Una vez transcurridas las dos semanas, como punto final de la convivencia, las mujeres deberán ver un vídeo donde se enterarán de qué es lo que piensan realmente de ellas los que han sido sus compañeros de casa.
Enfrentamiento entre los maridos reales y los 'postizos'
Antes de volver a la normalidad, las dos parejas que encabezan cada familia se encontrarán de nuevo y tendrán que realizar una mesa redonda en la que se someterán a juicio los comportamientos de una madre y de otra, desde el punto de vista de los maridos reales y de los 'postizos'.
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Teniendo en cuenta que las mujeres y los hombres con los que han convivido durante dos semanas habrán sido del tipo contrario al que eligieron para casarse, los reproches pueden sucederse uno tras otro. Tras este cara a cara, cada pareja volverá a su verdadero hogar.
Programa sin presentador que se apoyará en tres pilares
El día a día de las dos casas se mostrarán de forma paralela para que todos los espectadores puedan seguir el discurso narrativo. Será un programa sin presentador que se apoyará en tres pilares:
Una 'voz en off' que ayudará a enterarnos de todo lo que va ocurriendo con el devenir de la convivencia; una serie de rótulos que recalcarán acciones y situaciones, y el empleo de la música para enfatizar los momentos mas intensos.
