Polanco: “El Gobierno valorará los cambios de los últimos 15 años para que C+ emita en abierto”
El presidente del grupo Prisa, Jesús de Polanco, se mostró hoy convencido de que el Gobierno tendrá en cuenta los cambios producidos en los últimos quince años en el sector audiovisual para acceder a la petición de que Canal+ pueda emitir las 24 horas en abierto, y mostró su “sorpresa” por las “estúpidas guerras de medios” producidas en torno a las licencias de televisión analógica, que responden a “embozados intereses particulares”. “Estoy seguro de que el Gobierno tendrá en cuenta el cambio de las circunstancias del mercado y las muchas transformaciones sucedidas, en los tres últimos lustros, en este sector, a la hora de valorar la solicitud presentada”, aseguró Polanco hoy en Madrid durante su intervención en la Junta General de Accionistas de Prisa. En su discurso, el máximo responsable de Prisa hizo hincapié en que la petición de Canal+ de ampliar su licencia de televisión, para pasar de las actuales ocho horas de emisión en abierto a 24, “nada tiene que ver” con el proyecto de ley de impulso de la Televisión Digital Terrestre (TDT), liberalización de la televisión por cable y fomento del pluralismo, “ni con la ampliación del número de licencias” anunciada por el Gobierno, y a la que optan Net TV y Veo TV, que sólo emiten en digital. Asimismo, el consejero delegado del grupo, Juan Luis Cebrián, expresó su confianza en que el Gobierno atienda la petición de Canal+: “Esperamos ver operando un canal generalista durante este mismo ejercicio”. También reclamó una regulación “más transparente” de las actividades de los medios y una “clarificación” del sector audiovisual. Polanco expresó su “sorpresa” por las reacciones de “algunos colegas” y criticó la “confusión que se ha generado de cara a la opinión pública”, cuando la solicitud de C+ y las nuevas licencias son cuestiones “independientes”. A su juicio, la “manipulación informativa” de algunos medios pone de relieve la “endeble salud” del sector, “aquejado de un intervencionismo político rampante que el actual Gobierno ha prometido suprimir”. Sobre esa base, renunció a contestar a las “acusaciones gratuitas y falaces” vertidas contra Prisa, y dijo que los medios de su grupo no recogerán expresiones injuriosas contra presidentes de otros medios que “promueven esos excesos”, ni “mucho menos amenazas como las que se han exhibido sonoramente, pretendiendo la intimidación y el chantaje”. Igualmente, apuntó que Prisa no aparecerá nunca “en fotografía alguna que implique una protesta contra los colegas o un reclamo que dificulte su actuación”, en referencia al manifiesto promulgado meses atrás por una representación de medios nacionales. Respecto al proyecto de ley de la TDT, que incluye el adelanto del apagón analógico a 2010, pidió al Gobierno que cuente con todos los agentes implicados y recordó que “ya se tiene sobrada experiencia del escaso recorrido que suelen obtener decisiones de este tipo cuando intentan imponerse por decreto”. Polanco urgió al Ejecutivo para que propicie la generación de “más y mejores” contenidos digitales, junto a la fabricación y comercialización de nuevos equipos a precios asequibles para los consumidores. Seguridad jurídica para TV local Por otro lado, se mostró seguro de que la regulación anunciada para las televisiones locales aportará “mayor estabilidad y seguridad jurídica a un sector hasta aquí excesivamente expuesto a los intervencionismos y a la arbitrariedad”. Por último, comentó que un año después de los atentados del 11-M “hay quien quiere imponer su torcida visión de aquellos” eventos y defendió el trabajo realizado por los medios del grupo, especialmente El País y la Cadena SER. Polanco defendió que estos medios han “tenido que soportar denuesos y ofensas por parte de grupos y sectores que todavía no han sabido acoplar sus deseos a la realidad, y que se esfuerzan en deslegitimar, a cualquier precio, el proceso electoral y el buen hacer” de los periodistas. Sobre esta cuestión, Cebrián aseguró que la SER jugó un papel “crucial” a la hora de informar a los ciudadanos frente a las “mentiras del poder”.