El último truco de “Gran Hermano” para enganchar a la audiencia
Cada año, el “Gran Hermano” estadounidense intenta sorprender a sus seguidores con algún giro de tuerca inesperado. Si en la pasada edición, la novedad estuvo en el “factor ex” -algunos concursantes se encontraron con sus ex parejas en la vida real dentro de la casa-, en esta quinta entrega, que arrancó el pasado 6 de julio, la clave del éxito parece estar en el “Project DNA”. ¿“Gran Hermano” o “Gran Gemelo”? Según informa el New York Post, el “Project DNA” o “Do Not Assume” (No Des Nada Por Hecho) es una idea de Arnold Shapiro, el productor ejecutivo de “Gran Hermano” en Estados Unidos, que consiste en que algunos de los concursantes tengan hermanos gemelos, sin que el resto de compañeros lo sepan. Como pueden imaginar, el conflicto y la confusión en la casa están garantizados. El pasado jueves por la noche, algunos habitantes estaban convencidos de que uno de sus compañeros, el “afable” Adria, tenía doble personalidad o se había vuelto completamente loco, ya que éste había pasado todo el mes intercambiándose con su hermano gemelo en el “backstage” sin que sus compañeros tuvieran la más mínima sospecha, puesto que son idénticos. “Todos los años se inventan algún giro, pero éste es realmente diferente; no puedes dejar de ver el programa porque quieres saber si los habitantes terminan descubriendo que hay gemelos”, dice una seguidora del programa en un foro de Internet. ¡Sorpresa, soy tu hermano! Pero éste no es único giro de tuerca introducido por el “Gran Hermano” americano para afrontar esta quinta edición. No hace mucho que dos concursantes, Ellis y Jennifer, descubrieron durante su estancia en la casa que son hermanastros, hijos del mismo padre, un veterano de Vietnam que perdió medio pie al pisar una mina.