Reinventar la capital grancanaria, apuesta para atraer al turismo de calidad
Las Palmas de Gran Canaria no ha digerido que dejó de ser una ciudad “Duty Free” o “paraíso de compras” para peninsulares o no ha sabido encontrar desde que esto pasó, ya hace años, una nueva vía para atraer al turismo de calidad, hecho que explica en parte su “degradación”.
Así lo opinó este martes el consultor Josep Chias, quien presentó los ejes del Plan de Marketing Turístico de Las Palmas de Gran Canaria cuya elaboración le ha encargado, por un presupuesto de 30.000 euros, el grupo de gobierno que dirige Jerónimo Saavedra y que se dará a conocer en septiembre, aunque estará culminado a finales de julio.
En opinión del profesor, encargado de elaborar, en 1991, el plan turístico de Barcelona, Las Palmas de Gran Canaria ha de hacer frente a “débiles amenazas y fuertes oportunidades” para recuperar la importancia que tuvo hace décadas como la ciudad turística de referencia de Canarias, un objetivo en el que han de implicarse y rendir cuentas tanto el sector público como el privado.
Josep Chias destacó que los estudios desarrollados hasta el momento de cara a la elaboración del plan de marketing turístico de la capital grancanaria indican que “las cosas van razonablemente bien” respecto al número de visitantes que recibe la ciudad, aunque consideró necesario que aumente, y a su “alto” grado de satisfacción.
Sin embargo, estos trabajos previos, que este martes se presentaron a unos 200 agentes del sector turístico de la ciudad en unas jornadas para recabar sus aportaciones, han puesto de manifiesto la necesidad de impulsar “un cambio significativo” en las campañas promocionales que se emprenden para atraer a nuevos visitantes, aspecto en el que, en opinión de Chias, Gran Canaria en general debe aprovechar la ventaja de ser un destino más desconocido que Tenerife en el mercado peninsular por el mayor interés que ello puede suscitar en potenciales turistas que no han viajado nunca a la isla.
Josep Chias también aludió al esfuerzo que se ha de hacer en Las Palmas de Gran Canaria para que los productos que oferta al visitante se adapten al turismo de calidad que se quiere tener, ya que, según dijo, ni el actual planeamiento urbanístico de una de sus joyas, la playa de Las Canteras, ni su oferta hotelera, comercial y gastronómica, reúnen lo que demanda este tipo de viajeros.
“El salto que hay que hacer no es sólo poner un hotel de cinco estrellas, sino que determinada oferta comercial, gastronómica y hotelera tiene que ponerse a lo que es hoy un cinco, un cuatro y un tres” estrellas, refirió.
Para conseguir este salto cualitativo, Chias consideró que, como ha ocurrido en Nueva York tras el 11-S, es necesario que Las Palmas de Gran Canaria se reinvente a sí misma con iniciativas empresariales y sociales “individuales”, en lugar de esperar, como suele ocurrir en España, a que sea el sector público el que se mueva.
Además de un cierto dinamismo, Chias pidió al sector privado de la capital grancanaria “un poco de buen gusto” para erradicar la “contaminación visual” que se da, a su juicio, en la playa de Las Canteras.
Respecto a la oferta nocturna, por la que destacó hace décadas Las Palmas de Gran Canaria y que se ha ido perdiendo, el consultor dijo que éste es uno de los atractivos a fomentar en una ciudad que quiera tener al turismo como uno de sus principales motores, si bien apuntó que esta actividad se debe regular con el funcionamiento de la urbe, tanto respecto a los espacios como a los horarios en los que se desarrolla.
Chias recordó que parte del éxito de Barcelona se basa en el turismo joven, para el que se ha habilitado una oferta nocturna en la que también se debe tener en cuenta los eventos culturales que se programan a lo largo del año, como ocurre en Las Palmas de Gran Canaria con los distintos festivales que celebra.
Sobre el nombre de la ciudad, el consultor consideró que el hecho de que sea tan largo es una dificultad técnica que hay que paliar con un símbolo muy importante y que se recuerde mucho visualmente, de forma que pueda acompañarle en las promociones turísticas que se hagan en adelante con un efecto de sustitución, como ocurre con el corazón de Nueva York o el huevo frito de Miró en la marca turística de España.
Para ello, el equipo que dirige Chias está consultando con a los artistas plásticos de la ciudad para recopilar las distintas visiones que tienen sobre los símbolos que, según ellos, definen a Las Palmas de Gran Canaria.