El sindicato policial JUPOL ha mostrado su apoyo a los agentes de la Policía Nacional que el pasado miércoles intervinieron en una operación antidroga en Tenerife que se saldó con ocho detenidos y disparos contra sus perros. Defienden la actuación policial al asegurar que “tuvieron que actuar en defensa propia contra tres perros de raza potencialmente peligrosa que atacaron a los agentes”.
Afirman uno de los policías resultó herido por mordedura de uno de los perros y, a su vez, otro de los canes tuvo que ser abatido por los agentes para poder así “garantizar la integridad física de los policías”.
Han opinado que el operativo “se ajusta de forma estricta a la legalidad vigente y a los protocolos policiales existentes en la Policía Nacional”.
Según ha denunciado la organización sindical, “tras la actuación policial se ha producido un ataque indiscriminado contra los policías en las redes sociales; ataques ante los que, una vez más, ni la Dirección General de la Policía, ni el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, se han pronunciado y ante las que nuevamente se ha dejado a los agentes de la Policía Nacional abandonados a su suerte y sin apoyo institucional”.
El sindicato dice que desde el primer momento “se ha puesto a disposición de los policías, poniendo a su servicio todo el apoyo necesario, su gabinete jurídico y el gabinete psicológico”.
Concluyen que estos hechos y otros similares se podrían evitar si desde el Gobierno, desde el Ministerio del Interior y desde la DGP no les hubieran dejado en “una situación de desamparo, de abandono y de desprotección”, y se hubieran “preocupado” de llevar a cabo las tres reivindicaciones del sindicato en este sentido: la distribución de pistolas Táser, la actualización de Plan Nacional de Tiro y la implantación de un servicio de asistencia psicológica y jurídica para los policías nacionales implicados en este tipo de situaciones.