La AUC denuncia la publicidad encubierta y pone como ejemplo a “Mis adorables vecinos”
La Asociación de Usuarios de la Comunicación (AUC) denunció ayer la intensificación de la presencia encubierta de marcas comerciales dentro de la programación televisiva, práctica conocida como 'product placement' o emplazamiento de producto. Como ejemplo, citó en un comunicado la serie de Antena 3 recién estrenada 'Mis adorables vecinos', “en la que no sólo se muestran marcas y productos, sino que además éstos se convierten en centro de la acción y los protagonistas enuncian mensajes comerciales explícitos”. En este sentido, recordó que hasta ahora lo habitual era que los contenidos publicitarios se dejaran fuera de la serie, en escenas adjuntadas al inicio o al final del episodio con la advertencia de 'telepromoción'. Según la AUC, la mayoría de las cadenas de televisión emiten programas con emplazamiento de producto, generalmente del género ficción, “lo que indica claramente la intencionalidad comercial existente detrás de esta práctica”. El emplazamiento abarca productos de alimentación, cerveza, vino, refrescos, limpieza, telecomunicaciones, bancos o electrodomésticos. En algún caso ha detectado emplazamientos de productos cuya publicidad está prohibida, como bebidas alcohólicas de más de 20 grados o tabaco.
La AUC advirtió que el emplazamiento de producto puede considerarse publicidad ilícita por engañosa según la Ley General de Publicidad, al no diferenciarse del resto de contenidos y cuya presentación puede inducir a error sobre la naturaleza publicitaria del mensaje.
Por su parte, la Ley que incorpora la Directiva de la Televisión Sin Fronteras prohíbe el emplazamiento de producto que supone una remuneración para el operador o tiene intencionalidad publicitaria por parte de éste, al considerarlo publicidad encubierta.
La AUC no considera necesario erradicar el emplazamiento de producto, siempre y cuando se regule adecuadamente. Para ello, señaló que sería necesario que se reconozca la naturaleza publicitaria del emplazamiento de producto por parte de anunciantes, agencias y medios; que el emplazamiento se acompañe de alguna advertencia óptica o acústica; que se restrinja su utilización en los programas dirigidos a la audiencia infantil; que no se convierta en elemento activo del programa contenedor y que no puedan realizarlo aquellos productos y marcas cuya publicidad esté prohibida.