Interés por las noticias obliga a cadenas a cambiar su programación
La vuelta a la información en detrimento de otros contenidos más livianos y variados, que van desde el estilo de vida de los famosos hasta la moda pasando por la gastronomía e, incluso la literatura o el cine, es general en todas las franjas horarias de programación, pero especialmente en los programas matutinos. Un estudio difundido ayer por el grupo Project for Excellence in Journalism en coordinación con la Facultad de Periodismo de la Universidad de Columbia (Nueva York), que comparó las programaciones de las grandes cadenas de televisión entre el 18 y el 29 de junio y entre el 15 y el 26 de octubre, indica que en todas ellas se disparó la cantidad de noticias que se pusieron en antena. Al mismo tiempo se indica que estos cambios de programación han generado ya a las tres grandes cadenas comerciales de EEUU unos gastos de 320 millones de dólares, cifra que llega hasta una cantidad entre los 950 y los 1.100 millones de dólares si se contabilizan todas las cadenas locales y las de cable. Los programas matutinos multiplicaron por siete su volumen de noticias y pasaron del 6,9 por ciento en junio al 58,1 por cien en octubre, subida que se produjo a costa de la reducción de las informaciones referentes a famosos -del 25,3 bajó al 12,2 en octubre- y de temas de sociedad, que cayeron del 46,9 al 12 por ciento. Otras noticias que sufrieron un importante descenso y casi llegaron a desaparecer fueron las referentes a tribunales y asuntos judiciales, que quedaron reducidas al 1,7 por ciento de la programación, cuando en junio ocupaban el 11,5 de la información de estos matutinos. Las noticias económicas, nunca demasiado presentes en esta franja horaria, cayeron entre enero y octubre del 4,3 por ciento al 2,6 mientras que las que hacen referencia a ciencia y tecnología experimentaron una subida del 5,1 al 13,5 por ciento. En lo que se refiere a los informativos tradicionales de las cadenas, el estudio encuentra que el nivel de información puntual se ha colocado más cerca de los niveles de 1970 -que fueron especialmente fecundos en noticias- que de los 90. La política sustituye a la crónica social En estos momentos, el estudio indica que 8 de cada 10 informaciones que se dan en estos informativos se refieren a asuntos del Gobierno y de política nacional o internacional, cifra que está muy por encima del 67 por ciento registrado hace unos pocos meses. Igualmente, las historias relacionadas con los famosos y la forma de vida, que ocupaban cerca de la cuarta parte de los informativos nocturnos de las tres grandes cadenas de EEUU -ABC, CBS y ABC-, han desaparecido prácticamente de escena. Al mismo tiempo, el nivel de audiencia de todos los informativos ha crecido, lo que contrasta con el declive de los años anteriores, indica este estudio que, por el momento, no cuantifica las personas que supuestamente ven estos informativos. La cadena que mayor número de informaciones de rabiosa actualidad ofrece, tanto antes como ahora, es CBS, que ha pasado del 53 por ciento al 86 por ciento del total de sus informativos, mientras que ABC, que antes estaba en torno al 44 por ciento, ha subido hasta el 76 por ciento y la NBC, hasta ahora en el 39 por ciento, está hoy en el 79 por ciento. El estudio subraya que estos cambios en la programación para satisfacer la ansiedad informativa del público, han costado a las citadas tres cadenas unos 320 millones de dólares, derivados de los operativos que han tenido que ponerse en marcha para cubrir todos los ángulos de los atentados, más la guerra. El coste se incrementa hasta una cifra que va de entre los 950 y los 1.100 millones de dólares, si se contabilizan todas las cadenas de televisión por cable y las docenas de emisoras locales afiliadas a las tres grandes compañías.