El Cabildo herreño lamenta los ''graves'' daños del Ecomuseo por las lluvias
El Cabildo de El Hierro informó este jueves de que las lluvias que durante el pasado fin de semana cayeron en la isla produjeron “graves” en el Ecomuseo de Guinea, un bien de interés cultural situado en el Valle del Golfo y en el que se muestra la riqueza patrimonial y arqueológica herreña. Según los técnicos de la Unidad de Patrimonio del Cabildo herreño, las lluvias inundaron el poblado con lodo y piedras y ocasionaron graves daños en las viviendas tradicionales con techos de colmo, en su mobiliario y enseres tanto de la exposición abierta al público como en las casas que permanecían cerradas.
También resultaron afectadas las instalaciones artísticas que ocupaban las cavidades naturales del poblado con ocasión de la celebración de la Bienal de Arte, Arquitectura y Paisaje en El Hierro. Allí exponía su obra la artista peruana residente en América Cecilia Paredes, quien a partir de un relato casi “mágico” contextualizado en el poblado de Guinea construyó un árbol artificial en el interior de un tubo volcánico.
También mostraban su obra Concha Jerez y José Iges, quienes partían de aspectos históricos y geológicos para levantar una instalación sonora y visual.
Informes y colaboración
Los técnicos solicitaron n informe técnico tanto del Consejo Insular de Aguas como de obras y Urbanismo con el fin de determinar la influencia que haya podido tener la carretera de Las Puntas en estas inundaciones y las actuaciones que se recomienden para evitan que los hechos se repitan en el futuro.
Además, se pidió la colaboración, en caso desinteresada, de la restauradora Cristina de Andrés, según informó en un comunciado la consejera de Cultura, Milagros del Valle Padrón. De Andrés ayudará a determinar qué enseres y mobiliario histórico se pueden recuperar.
El complejo del poblado es uno de los lugares más visitados por los turistas que se acercan a El Hierro y cuenta con 20 sitios domésticos, 31 recintos habitacionales, 14 aljibes, cinco hogares, dos lagares, dos eras y nueve pozas y tanquillas. Además, relacionado con el cuidado de los animales domésticos, tiene 17 cuadras, cuatro estercoleros, cinco chiqueros, cuatro juaclos y cinco chozas.
En Guinea, explicó el Cabildo de El Hierro, convergen manifestaciones de las dos etapas de la historia insular: la prehistórica y la histórica. La razón, añadieron las mismas fuentes, estriba en las óptimas condiciones naturales que posee el paraje donde se asienta, en la que entre su flora y fauna destacan el Lagarto Gigante de El Hierro y uno de los escasos afloramientos de agua potable en el Valle del Golfo, así como la geografía de su relieve a camino entre las distintas zonas de población de la isla.
Los primeros pobladores de El Hierro fueron los bimbaches, quienes se establecieron en las cuevas y tubos volcánicos, y después de la Conquista se introdujeron otros modelos de viviendas por los colonos normandos hasta la actualidad. Cada una de las viviendas de piedra y colmo del poblado representan un momento de la historia de la isla con sus enseres correspondientes.
Todo el conjunto se ha recuperado gracias a un ambicioso proyecto de restauración que ha contado con financiación europea.
