Nuria Espert vuelve al Teatro Real como directora de escena de 'Tosca'

La actriz asegura que no tiene ninguna intención de volver a dirigir ópera y prefiere seguir en la interpretación

MADRID, 8 (EUROPA PRESS)

Nuria Espert regresa al Teatro Real como directora de escena de 'Tosca' de Puccini, una función que estará en cartel del 12 y el 28 de julio, con dirección musical de Renato Palumbo y que ya pudo verse en el coliseo madrileño en enero de 2004.

Este espectáculo (del que Espert ha cambiado “minúsculas cosas”) se gestó en coproducción con la Asociación Bilbaína de Amigos de la Ópera y llega ahora de nuevo al Real con un reparto encabezado por Violeta Urmana y Sondra Radvanosvsky (que se alternarán en el papel de Tosca), Marcello Giordani y Marco Berti (Mario Cavaradossi), Lado Ataneli y George Gagnidze (el Barón Scarpia), Felipe Bou (Cesare Angelotti), Valeriano Lanchas (el Sacristán), Carlo Bosi (Spoletta) y Károly Szemerédy (Sciarrone). Todos ellos acompañados por la Orquesta Sinfónica de Madrid. La escenografía es obra de Ezio Frigerio y los figurines de la oscarizada Franca Squarciapino.

'Tosca' (estrenada en el Teatro Costanzi de Roma el 14 de enero de 1900) es una de las óperas más representativas del repertorio verista italiano, que mezcla intriga y pasión. El libreto es de Giuseppe Giacosa y Luigi Illica, basado en la obra 'La Tosca' de Victorien Sardou (1887). Para Espert, este texto se ha quedado hoy “viejísimo” a diferencia del libreto, “muy actual”, en el que los protagonistas “se juegan la vida por unas ideas”, dice la directora de escena confesando que esto le sigue “emocionando”.

MANTENER LA “FRESCURA”

En un encuentro con los medios de comunicación, Nuria Espert ha recordado a su marido, ya fallecido, Armando Moreno, quien fue el impulsor de su trabajo operístico y de dirección. “Él me enseñó a comprender y a escuchar y me hizo entrar a través de Puccini y Mozart”, señala indicando que sus direcciones de ópera han sido “de lo más bonito que ha hecho” y se las dedica a su esposo. “Mi carrera de teatro se engrandeció mucho con la dirección”, ha apostillado.

Esta 'Tosca', que se representó una veintena de veces en el temporada 2004-2005 pretende tener “la frescura” de entonces. “Además esta reposición me hace especial ilusión porque está Gerard Mortier al frente del Teatro Real y sabía que esta obra no le gusta demasiado pero él me apoyó mucho cuando hicimos 'Elektra'”, apunta.

A este respecto, Mortier ha asegurado que la dificultad que tiene Puccini hace que “muchas veces sea mal interpretado”. Coincide con él Renato Palumbo quien opina que es algo que suele suceder con las obras de gran repertorio. “Mi misión es hacer de concertador, es decir, interesar a los solistas para que hagan algo más de lo que ya hacen y esto resulta muy difícil”.

UNA PERSONA DISTINTA

Han pasado seis años desde que se estrenó esta producción y Nuria Espert asegura que si tuviera que volver a hacer hoy posiblemente se plantearía algo diferente porque ella también es “otra persona”. “Me han pasado muchas cosas, he leído y viajado más, la vida se acelera y seis años hoy son como veinte en mi adolescencia”, ha dicho.

Sin embargo y haciéndose eco de las palabras de Peter Brook que dice que ningún espectáculo aguanta más de cinco año, en este caso concreto de 'Tosca', los decorados y figurines hacen que esa afirmación “quede cuestionada”, señala.

Espert dice trabajar desde un “extraordinario respeto” por los cantantes e intentando sacar “lo mejor” de todos ellos. “Eso me ha ayudado mucho siempre”, confiesa. “Los intérpretes de ópera hacen el gran esfuerzo de actuar. Es magnífico ver su entrega y disposición. Se vuelven flexibles, amorosos y delicados y sé que van a hacer lo imposible por complacerme”, afirma.

NO MÁS ÓPERA

Esta incursión de Nuria Espert en el mundo de la ópera parece que no volverá a repetirse. Ese, al menos, es su deseo. “No tengo ganas de abordar otros proyectos de este tipo. Me encuentro en un momento dorado de mi vida en el que me gusta mucho ser intérprete. Dirigir ha supuesto siempre estar muy lejos de mi casa y mi familia. Mi mundo es pequeño y sin él no puedo vivir”, ha explicado. “No volveré a dirigir ópera, espero que el Real no me tiente”, apostilla.

A este respecto la actriz dice que siempre le pareció que su trabajo como directora de ópera lo hacía con la impresión de ser “un impostor”. Esto no le ha sucedido, en cambio, en el teatro hablado. “Ser buena actriz me permite tener menos miedo a equivocarme”, asegura.

Según ha anunciado Miguel Muñiz, director general del Teatro Real, se han vendido ya 16.000 entradas para ver esta 'Tosca' bajo la particular mirada de Nuria Espert.

Etiquetas
stats