Si cierra Paulino, no voy

La respuesta de José Manuel Soria no se la esperaban en Asinca. “Si Paulino cierra los discursos, yo no voy”, dicen que les contestó el ministro de Industria, Energía y Turismo. Y se quedaron planchados, sobre todo porque nadie en el ministerio quiso atender a razones, ni siquiera al decreto de precedencias por el que se rigen este tipo de actos protocolarios. Porque Asinca tenía claro que junto al ministro del ramo había que sentar al presidente de la Comunidad Autónoma, que había confirmado su asistencia sin más condiciones que las normales para estos casos. Es decir, que se respete el protocolo que corresponde. En Asinca estaban perplejos la mañana de este martes y la primera decisión fue la de una asociación que quiere mantener su autonomía y no enredarse en caprichos de estrellas del celuloide. La frase que mejor resume la primera decisión tomada fue muy sencilla: que alguien llame al ministro y le diga que pueda pasar por aquí a buscar su medalla cuando quiera. Pero, para mejor proveer, alguien telefoneó a Presidencia del Gobierno a ver qué solución podían darles para tratar de congeniar lo normal con las exigencias del ministro. Y la respuesta fue a peor: si acude Soria, el presidente no va. En ese tris se encuentran ahora los industriales de Canarias, como si no tuvieran suficientes problemas con la que está cayendo.