Habrá que revisar

En la isla de La Palma llaman rendija al típico vecino que todo lo ve y todo lo cuenta, con el agravante de que suele echarle un poco más de película a la cuestión, para que la cosa sea más atractiva. Es así más o menos como cuenta las cosas de lo eólico y lo teldense José Manuel Soria, añadiéndole esa presunta autoridad que le otorga el presumir de información privilegiada. O supuesta. Si es capaz de afirmar a ciencia cierta que las investigaciones no le tocarán ni a él ni a su hermano, si es capaz de ir corriendo a pedir una comisión de investigación a sabiendas de que lo político es una cosa y lo judicial y policial otra, nos podemos encontrar ante dos escenarios: o es un farol muy peligroso o alguien le ha soplado desde donde se pueden soplar estas cosas que hasta él no llegarán. ¿Podría la Policía revisar cada una de sus rendijas?