Los que suenan

Una vez aplicada esa teoría de que Hecansa debe tener dos orientaciones bien diferenciadas y en manos también del sector privado, la inteligencia política que nos gobierna ya tiene dos elegidos. Por un lado, Carlos Romero, ex gerente de Titsa y ex director de Binter, se ocuparía de la parte de la explotación. Tiene experiencia en la gestión, pero desconocemos si sus capacidades para elaborar cuadros numéricos de los distintos porcentajes que tienen los sucesos pasados en la subida del crudo pueda aplicarse eficazmente a la gestión de la formación turística. El otro elegido es Pedro Jacinto Artiles, que ya fue eliminado de Hecansa (y así consta en las actas del Consejo de Administración expresamente) por querer cambiar el modelo de “Aprender Haciendo” por el clásico academicista de la Universidad. Propagó la idea de que a los alumnos se les explotaba si hacían prácticas en el hotel escuela, y que por esa vía los profesores no serían incorporados a las universidades por la puerta de atrás. Intentó -también sin éxito- crear dos gerencias: la académica (para él) y la de explotación.