Funcionan los correos del Zar mucho mejor que los gabinetes de prensa y las secretarías adscritas al Partido Popular. Mientras seguimos a la espera de que el consejero Carlos Sánchez, del Cabildo de Gran Canaria sector Política territorial, nos reciba, se acuerde de nosotros o se ponga al teléfono (nos da igual el orden), nos sigue llegando información acerca de su declaración “voluntaria” ante agentes de la Guardia Civil adscritos al Seprona. Ya les dijimos que la cosa tenía que ver con unos chalets construidos en suelo rústico durante su etapa de concejal en Santa Brígida. El asunto fue en La Atalaya y él lo reconoce, pero dice que fueron seis y no siete, y se sacude. Tampoco dice que esté imputado en compañía de dos arquitectos y una abogada, pero uno de los primeros ya ha sido llamado a declarar la semana próxima.