La oposición: ni está ni se le espera

Y cómo no, la tercera parte de la rumorología que ya es más que noticia, es que la oposición no está ni se le espera. Arcadianos y nardistas parecen desaparecidos en combate postelectoral. Entre que no se constituyen en el Metropol o que aparecen poco y lo mucho que propagan esas ausencias las huestes del poder, lo malo dicen que cuando quieran ya han perdido el hilo del control. Muchos dicen que Nardy no ha sido avistada nunca y que cuando los socialistas se presentaron divididos al personal resabiado del viejo Hotel de Ville en dos fases, los arcadianos y los carolinos, esos duendes del Ayuntamiento que han visto tantas corporaciones entrar y salir, y que saben más que los red-rabbits, los ratones colorados, sentenciaron: estos no se comen una rosca.

Y cómo no, la tercera parte de la rumorología que ya es más que noticia, es que la oposición no está ni se le espera. Arcadianos y nardistas parecen desaparecidos en combate postelectoral. Entre que no se constituyen en el Metropol o que aparecen poco y lo mucho que propagan esas ausencias las huestes del poder, lo malo dicen que cuando quieran ya han perdido el hilo del control. Muchos dicen que Nardy no ha sido avistada nunca y que cuando los socialistas se presentaron divididos al personal resabiado del viejo Hotel de Ville en dos fases, los arcadianos y los carolinos, esos duendes del Ayuntamiento que han visto tantas corporaciones entrar y salir, y que saben más que los red-rabbits, los ratones colorados, sentenciaron: estos no se comen una rosca.