España se vuelve azul
España se ha vuelto azul. O ya lo era, a juzgar por el número de votos -solo 500.000 más que en las elecciones de 2008- que han dado al PP la mayoría absoluta en el Congreso con 186 escaños. En la imagen que ha dejado el 99,25% de los votos escrutados solo resaltan dos circunscripciones en rojo: Sevilla y Barcelona, donde los cabezas de lista del PSOE, Alfonso Guerra y Carme Chacón, han arrancado la victoria, no sin dejar cadáveres por el camino.
En Barcelona, el PSC ha perdido casi 585.208 votos (y dos escaños -de ocho a seis- con un 99,74% de escrutinio) con respecto a las anteriores legislativas, más de una quinta parte de los 4,3 millones de electores que han abandonado al candidato socialista, Alfredo Pérez Rubalcaba. En Sevilla, los 187.705 votos menos dejan al PSOE a poco menos de 33.000 votos del PP, frente a una diferencia de casi 200.000 en 2008.
Los nacionalistas también han conseguido pintar de verde y añil País Vasco y el resto de Cataluña. Bizkaia y Guipúzkoa han ido a PNV y Amaiur, donde han conseguido tres escaños respectivamente. CiU ha logrado imponerse en Lleida (dos diputados) y Girona (tres).
El resto de circunscripciones que han impedido el pleno al 19 han sido Asturias, Álava, Tarragona, Soria, Cáceres, Córdoba y Jaén, donde se ha producido un empate entre las dos fuerzas mayoritarias.
