Guardias civiles plantean un “modelo policial alternativo”
La Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC) en Canarias apuesta por fusionar el cuerpo armado con la Policía Nacional, creando un nuevo cuerpo, y mandar 3.000 efectivos que están en labores actualmente duplicadas a dotar la Policía Autonómica Canaria.
Además, sostienen que con el ahorro que se podría conseguir con esta unión, el Gobierno central podría pagar ampliamente las policías autonómicas, pues cifran el ahorro en el conjunto del país de 4.000 millones de euros solo en salarios, a lo que habría que sumar la reducción de gastos en instalaciones y medios materiales.
Así lo han explicado este viernes en rueda de prensa el secretario nacional de Comunicación de la AUGC, Juan Antonio Delgado, así como los secretarios generales de la asociación en la provincia de Las Palmas y la de Santa Cruz de Tenerife, Juan Couce y Juan Fernández, respectivamente.
Delgado explicó además que no habría problema ni disputa alguna en la recolocación de efectivos, puesto que los guardias civiles estarían perfectamente dispuestos a pasar a la Policía autonómica, tanto la canaria como otras, pues “cualquier cambio sería a mejor”. “Somos los que menos medios tenemos, menos salarios y menos libertades”, aseveró.
“Unificando los dos cuerpos estatales sobrarían 3.000 efectivos que podrían pasar a la policía autonómica. Sólo habría que cambiarles de uniforme”, remarcó Delgado, quien además sentenció que con esa operación “el Estado podría pagar la Policía autonómica canaria” sin ningún tipo de problema.
Pero frente a este cambio está la realidad, una en la que los guardias civiles dicen que Guardia Civil y Policía Nacional, con “multitud de unidades duplicadas”, “no solo no se facilitan información sino que casi la ocultan, para llevarse la medalla”.
Sin unificación harían falta 700 Guardias Civiles más
“Tenemos unidades duplicadas, en investigación, drogas, aeropuertos, todo duplicado. Es un laberinto enredado donde no nos aclaramos ni nosotros mismos, sobre qué competencias y qué trabajo debe hacer cada cuerpo de los actuales [entre la Nacional, Guardia Civil, autonómica y local, o incluso portuaria]. Y de esta manera pasa que le roban a una señora el bolso en la playa, va a la Guardia Civil, que la remite a la Policía local. Y cuando llega, en la local le dicen que es competencia de la Guardia Civil. El sistema es claramente ineficiente”, ha relatado Delgado.
Y en esta realidad, ha explicado la AUGC, no solo no hay un excedente de agentes que se podrían dotar al cuerpo autonómico, sino que faltan del orden de 700 guardias civiles en Canarias sólo para poder atender las obligaciones que tienen asignados actualmente.
Además, han explicado que si no se produce este suplemento de dotación --unos 400 en la provincia de Las Palmas y otros 300 en la de Santa Cruz de Tenerife--, hay al menos 12 de los actuales puestos que consideran “inoperantes” en sus condiciones actuales.
En la actualidad habría puestos “inoperantes”
El por qué de la inoperancia de estos puestos lo justifican en su falta de efectivos, con 10 o menos agentes, algo que “no garantiza ni que esté abierto las 24 horas”.
En Gran Canaria, Couce dijo que dos de los puestos que sería mejor fusionar con otros centros mayores son, al menos, Tejeda y Agaete, incorporándolos a Teror y Guía, respectivamente. “Cuando la gente pasa ve el cuartel y algún guardia civil y piensa que está protegido. Pero eso no es seguridad”, remarcó.
Couce volvió a su vez a poner encima de la mesa las comisiones de servicio. Por ejemplo explicó que la reciente creación de los Grupos Roca para vigilar entornos rurales se ha hecho de esa manera, es decir, “detrayendo efectivos de otras tareas y no incorporando más medios ni humanos ni materiales”, lo que a sui juicio “claramente debilita los servicios de seguridad ciudadana”.
En vez de remilitiarizar, recivilizar
Además, los tres representantes asociativos dicen estar preocupados con el cambio que consideran que el Gobierno está a punto de hacer para “remilitarizar” aún más la Guardia Civil y acabar con su derecho de manifestación a través del régimen disciplinario de las Fuerzas Armadas. “Quieren que seamos una asociación cultural y nos negamos. Las policías en España tienen que ser civiles, y nosotros somos policías. Que militares sean los militares”, concluyó Couce.