Dinamización plateada

Nos apasiona esto de la dinamización comercial, una nueva modalidad de potenciación del comercio tradicional consistente, básicamente, en moverse mucho para que la zona que te ha tocado se mueva aún más, los comerciantes ganen más dinero y a ti te regalen un jabugo por navidad. En la dinamización comercial de Las Palmas se ha invertido mucho dinero, pero como le hemos venido contando, de una manera un tanto sospechosa. Ya saben que esos dinamizadores tan dinámicos, contratados a propuesta de la vía plateada que hoy gobierna la Cámara de Comercio y de Frente Marítimo, fueron en parte utilizados por esa misma vía para engrandecer a José Miguel Suárez Gil y a las asociaciones que él apadrina y ensolera. Los dinamizadores de la anterior campaña, que ahora están pendientes de que los pongan de nuevo a trabajar, fueron formados por la Universidad, pero nos chisman que la cosa ha cambiado. Tanto que hasta dicen que Ezequiel Ramírez ha sido convenientemente puenteado por Adán Martín y sus muchachos al descubrir que en el Cabildo grancanario le habían cogido la matrícula al asunto plateado. Pues bien, dicho y hecho. Leemos este domingo un anuncio en La Provincia ofertando un curso de especialización de dinamización de áreas comerciales urbanas. Se impartirá en Las Palmas, claro, pero lo organizan Coreco y Fedeco. Que qué es Coreco, pues la confederación regional de comercio que preside Luis de Miguel, el hombre plateado de Tenerife. El vicepresidente es Roque Cáceres y el tesorero, José Miguel Suárez Gil. La pata grancanaria de Coreco es Confeco, cuyo presidente es Roque Cáceres y el secretario general, Suárez Gil. Fedeco, por su parte, es la pata chicharerra del invento, y lo preside el mentado Luis de Miguel. En definitiva, la formación vuelve a sus raíces plateadas, con lo que ya nos podemos imaginar el olor, el color y sabor de la nueva dinamización. Como los cangrejos.