Como locos por un molino

La ventolera que invadió muchos despachos vinculados al Partido Popular en aquellos primeros meses de 2004 fue espectacular. Los correos presuntamente salidos de Industria incluían nombres de cargos públicos a tocar, y algunos de los tocados se preguntaron por qué ellos iban a ser menos. Así que, ni corto ni perezoso, a algún alcalde se le ocurrió la idea de pedir también un trozo de suelo público al Cabildo para poder concursar. Revisando la lista de terrenos adjudicados por el Cabildo en diciembre nos encontramos con un conocido de la casa, el alcalde de Gáldar, Manuel Godoy. La Cooperativa Agrícola Los Llanos de Sardina, de la que él es presidente y su hijo Daniel gerente, aparece adjudicándose un trocito de suelo en una finca insular ¡en Agüimes! Autogeneración no era, seguro. Ni para colgar los plátanos de las aspas.

La ventolera que invadió muchos despachos vinculados al Partido Popular en aquellos primeros meses de 2004 fue espectacular. Los correos presuntamente salidos de Industria incluían nombres de cargos públicos a tocar, y algunos de los tocados se preguntaron por qué ellos iban a ser menos. Así que, ni corto ni perezoso, a algún alcalde se le ocurrió la idea de pedir también un trozo de suelo público al Cabildo para poder concursar. Revisando la lista de terrenos adjudicados por el Cabildo en diciembre nos encontramos con un conocido de la casa, el alcalde de Gáldar, Manuel Godoy. La Cooperativa Agrícola Los Llanos de Sardina, de la que él es presidente y su hijo Daniel gerente, aparece adjudicándose un trocito de suelo en una finca insular ¡en Agüimes! Autogeneración no era, seguro. Ni para colgar los plátanos de las aspas.