Fernando Alonso llega a Bahrein con el objetivo de no descolgarse en el Mundial

El piloto español Fernando Alonso (Renault) tratará de volver a entrar en los puntos este fin de semana en el Gran Premio de Bahrein, una cuarta cita del campeonato del Mundo de Fórmula 1 en el que la conveniencia o no del uso del KERS focaliza el debate y la preocupación de las diferentes escuderías en las horas previas a la carrera.

Tras las tres atípicas pruebas que han abierto la temporada, y con un Mundial 'patas arriba', el campeonato llega al desierto de Oriente Medio, donde las altas temperaturas, el viento, la arena y las cuatro largas rectas con las que cuenta el circuito de Sakhir, que figura en el calendario desde 2004, serán un interesante desafío para los diferentes equipos en esta próxima etapa del, hasta el momento, imprevisible Mundial.

Para esta cita, Alonso, que es noveno en el campeonato con cuatro puntos, tratará de volver a situarse entre los mejores después de los fiascos de Malasia y China, donde con un undécimo y un noveno puesto, respectivamente, rompió una racha de siete carreras consecutivas en las que el asturiano había logrado puntuar.

A la espera de que en el Gran Premio de España, que se disputará el próximo 10 de mayo en el Circuit de Catalunya, su monoplaza incorpore un paquete de mejoras, incluido un difusor muy similar al diseñado por Ross Brawn, que le permitan aspirar con más garantías por la victoria en cada carrera, para la prueba de Bahrein el bicampeón del mundo quiere conseguir el mayor número de puntos posible para no perder de vista los puestos de cabeza.

Bajo esta premisa, lo cierto es que Alonso tiene razones para ser optimista en Sakhir. En concreto, dos motivos podrían hacer pensar en una reacción del ovetense en este trazado: la mejoría mostrada en China con el difusor doble que colocaron en el monoplaza sus mecánicos a marchas forzadas, y sus precedentes en este circuito, donde en dos ocasiones, las campañas de sus dos títulos (2005 y 2006), logró subirse a lo más alto del podio.

A partir de ahí, con un quinto y un décimo puesto en los dos años siguientes, sus resultados no son tan halagüeños, aunque Alonso confía en que la rapidez que mostró hace tan sólo una semana, donde incluso logró la segunda plaza en la clasificación, y el uso del KERS como arma para esas largas rectas, le catapulten a la lucha por las primeras posiciones.

Renault, Ferrari y McLaren-Mercedes, con el KERS como aliado

El uso de ese extra de velocidad que proporciona este sistema, con su consiguiente penalización aerodinámica, se ha convertido en la gran duda de muchos equipos para esta carrera. Todo apunta a que Renault, Ferrari y McLaren, que desistieron de él en China, apostarán por incorporarlo en sus coches, dada la necesidad de alcanzar una buena velocidad punta en este circuito.

Y es que, como Renault, cuyo segundo piloto, el brasileño Nelson Piquet, después de su mal inicio, se jugará su continuidad, ya con el difusor usado por Alonso en China en su coche, McLaren y, sobre todo, Ferrari se juegan mucho en un Gran Premio en el que no pueden permitirse más fallos.

Especialmente delicada es la situación que se vive en Maranello, después de que la Scudería haya firmado su peor arranque desde 1981, donde tampoco cosecharon ni un solo punto tras tres carreras. De no sumar al menos dos puntos, Kimi Raikkonen y Felipe Massa entrarían en la historia como los pilotos que han realizado el peor inicio de un Mundial en toda la historia de Ferrari.

Para que el desastre no se produzca, Il Cavallino Rampante confía en los buenos resultados de su piloto brasileño en este circuito, donde ha logrado la victoria en los dos últimos años, en 2008, con el finlandés acompañándole en el podio, en el que fue el número 50 para él.

Mientras, en la escudería de Woking tampoco se respira un ambiente mucho mejor, ya que cuatro puntos de Lewis Hamilton, decimotercero aquí en 2008, y otros cuatro de Heikki Kovalainen son la escasa renta que ha cosechado hasta ahora McLaren. No obstante, en China mejoraron -el finlandés fue quinto y el británico sexto- y confían en ir hacia arriba a partir de ahora.

Los BrawnGP, a consolidar su liderazgo

Por su parte, los BrawnGP de Jenson Button y Rubens Barrichello, primer y segundo clasificado en el Mundial, intentarán mantener su dominio antes de que en Barcelona lleguen mejoras a todos los equipos que puedan nivelar la balanza. El sorprendente líder quiere sumar su tercera victoria en el Mundial, después de haber caído hasta el tercer puesto en Shanghai y, así, aprovechar la situación revuelta que se vive en todos los equipos para seguir ampliando su distancia al frente del campeonato.

Otros aspirantes a la victoria en Bahrein serán los Toyota de Timo Glock y Jarno Trulli, cuarto y sexto en el Mundial, y los Red Bull de Sebastian Vettel y Mark Webber. Los primeros, junto a BrawnGP y a Williams, montaron en sus coches desde la primera carrera los difusores ya confirmados oficialmente como legales, que les han hecho firmar un gran inicio, mientras que los segundos, fueron la gran sorpresa de la cita china.

Y es que la formación austriaca está demostrando en estas primeras carreras ser un equipo a tener en cuenta, algo que alcanzó su máximo exponente hace menos de una semana en tierras asiáticas con la victoria del alemán Vettel, que consiguió el segundo triunfo de su carrera y el primera en la corta historia de su escudería.