El Valencia rehuye el favoritismo ante un subcampeón con varios tocados

Efe

Valencia/Las Palmas de Gran Canaria —

Valencia Basket y Herbalife Gran Canaria protagonizan este viernes uno de los choques a priori más igualados de la Copa del Rey, en un duelo que enfrenta a dos equipos ya clasificados para cuartos de final de la Eurocopa y que marchan en tercera y séptima posición de la Liga Endesa, respectivamente.

Curiosamente, grancanarios y valencianos vuelven a verse las caras en la eliminatoria de cuartos de final, al igual que sucediera el pasado año en La Coruña, donde los jugadores entonces dirigidos por Aíto García Reneses se impusieron por 83-78.

Los levantinos, que han ganado los dos partidos disputados entre ambos esta temporada, acuden a Vitoria con su plantilla al completo, mientras que en el equipo canario preocupan los problemas físicos de varios de sus jugadores, que serán duda hasta última hora.

El Valencia Basket se presenta con la intención de superar en su debut al actual subcampeón del torneo a partir de la premisa de rehuir de la condición de favorito que muchos le otorgan para este encuentro.

Tras la experiencia de hace un año, en la que el partido entre los mismos contendientes dejó a los valencianos fuera de la Copa, el objetivo es alcanzar las semifinales, pero sin confianzas.

Así, Pedro Martínez, entrenador del Valencia Basket, ha señalado que su sueño es superar esta eliminatoria, pero también ha dicho que cualquiera de los dos equipos puede ser campeón, de la misma forma que puede irse a casa tras su debut.

“Tenemos opciones de ganar la Copa del Rey, pero también hay otros equipos que tienen más que nosotros”, analizó Martínez sobre una competición que considera que puede ganar cualquiera de los ocho contendientes.

Su equipo viaja en un buen momento de juego, con todos los jugadores disponibles y tras una buena racha de resultados a la que une su trayectoria impecable en la Eurocopa, en la que es uno de los favoritos para obtener el título.

Además, el Valencia Basket tiene como objetivo a largo plazo disputar la próxima Euroliga y un buen resultado en la Copa del Rey contribuirá a que el equipo aumente la confianza que tiene en estos momentos.

La trayectoria del equipo, ascendente a lo largo de la temporada, se ha fraguado en el juego de conjunto con el impulso reciente que le ha supuesto el regreso al equipo del base belga Sam Van Rossom tras una grave y larga lesión.

En cuanto al juego de conjunto se refiere, todos sus jugadores han entrado habitualmente en todos los partidos, lo que ha propiciado que ninguno de ellos llegue a la Copa exprimido o mermado en sus condiciones físicas.

El Herbalife regresa este fin de semana a un escenario de grato recuerdo para su afición, porque allí conquistó en septiembre del pasado año el primer título de su historia -la Supercopa-, tras eliminar en semifinales a los anfitrión Baskonia y batir en la final al FC Barcelona.

El equipo insular, vigente subcampeón de Copa del Rey y que ya ganó este curso la Supercopa en el Buesa Arena, acude a Vitoria con prudencia, preocupado por el estado físico de algunos de sus jugadores y otorgando la condición de favorito a su rival.

Su entrenador, Luis Casimiro, ha reconocido que no es optimista porque está preocupado por el estado de salud de su plantilla.

“Me apena no entrar en una corriente de ilusión, ambición y optimismo debido al estado de salud del equipo. Ahora mismo tengo una gran preocupación, porque hay cuatro jugadores con problemas físicos. Viajaremos con las dudas de Hollins, McCalebb, Xavi Rabaseda, que está cojo y casi descartado ante Valencia, y Hendrix”, señaló el técnico antes de viajar a Vitoria.

“Cuando lleguemos al partido, los que estén para competir intentarán dar el máximo. Me gustaría estar entusiasmado con la Copa, pero también con tener a todos los jugadores a disposición para conseguir esa victoria que se nos niega contra Valencia en la presente temporada”, añadió.

“Me gustaría ver -continuó- un partido intenso, en el que estuviésemos al 100 por cien físicamente, aunque ahora dudo de ello. Si el encuentro es igualado y llegamos con aspiraciones para competir en el tramo final, confío en que estemos calmados para tomar buenas decisiones en ataque y tengamos agresividad en defensa para sacar el partido adelante”.

Los enfrentamientos recientes entre ambos clubes favorecen claramente al Valencia Basket, que se ha impuesto en once de los doce partidos disputados en Liga en las seis últimas temporadas.

El que supere el cruce de cuartos se vera en semifinales con el ganador de la eliminatoria que enfrenta al Barcelona Lassa y al Unicaja de Málaga.