El fuego comenzó en la madrugada del pasado 15 al 16 de agosto en una zona de difícil acceso entre los municipios de Arafo y Candelaria. Las dificultades en las labores de extinción del que ha sido el incendio más complejo en las islas en los últimos 40 años han provocado que este se extendiera a lo largo de doce municipios de la isla, afectando con dureza a la zona de Izaña o a la Corona Forestal, entre otro puntos de la isla.
Las imágenes satelitales ofrecidas por el programa Copernicus ofrecen una mayor impresión de las afección que el fuego ha provocado sobre el territorio tinerfeño. Las imágenes tomadas dos días antes del incendio muestran la gran cantidad de vegetación existentes en la zona, que termina por quedar calcinada tras el paso del fuego. Entre medias, el humo se extiende a lo largo de la zona norte y este de la isla, teniendo como consecuencia el empeoramiento de la calidad del aire.