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¡Vaya tropa, Mariano!

Juan García Luján / Juan García Luján

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En medio de ese panorama, cada vez que paso junto a la puerta del 5º A sólo oigo las risas y carcajadas de los muchachos, y los lamentos del padre que les dice: “Richar, no lo vuelvas a hacer más. Ya tienes 20 añitos, si te vuelvo a ver con cosas robadas no te dejo entrar en casa”. Risas de Richar. “Y tú, Rita, no vuelvas a aceptar los bolsos de lujo de tu amigo Vito. Además no te quiero ver más con él”. Como respuesta oigo las tremendas carcajadas de Rita y Richar, “Ja,ja,ja?Papi, nos importa un pito lo que tú digas”. El señor del 5º A se llama Mariano y yo quiero preguntarle a usted, querido lector o lectora, si Mariano, mi vecino, se presentara a las próximas elecciones de su comunidad de vecinos. ¿Usted lo votaría?

Pues a Mariano Rajoy le pasa lo mismo que a su tocayo (mi vecino el del quinto), que no le hacen p? caso. Lo sospechábamos, lo intuíamos, lo habíamos comentado. Pero si alguien todavía albergaba alguna duda ayer quedó clarito. Después de haberse reunido la semana pasada 5 horas con Francisco Camps, después de haber mandado a toda su guardia pretoriana a comunicar por tierra, cielo, mar y aire que en Valencia tenían que rodar cabezas.

Ayer Ricardo Costa se comportó como Richar, el hijo de Mariano, cuando abrimos la puerta de su casa pudimos ver a Paco, Richar y Rita descojonados mientras papá Mariano se escondía para evitar ser visto por sus vecinos, para no quedar como un auténtico machango sin mando en plaza. En mi edificio los vecinos pensamos con razón que Mariano nunca llegará a ser presidente de la comunidad. Anoche el PP de Valencio ofreció un bochornoso espectáculo, con una reunión que acabó con risas, aplausos y fiestas de la gente de Camps y duras críticas de los zaplanistas.

Al finalizar la reunión José Joaquín Ripoll, ¡ presidente de la Diputación de Valencia!, declaró: “nos han dicho que no podíamos hablar y que, cuando entraran los periodistas teníamos que aplaudir, yo no aplaudí”. Mientras eso ocurría en Valencia, en la calle Génova se escondían y sacaban un comunicado que decía lo contrario de lo anunciado por Ricardo Costa. Después de ver todo ese espectáculo me acordé de mi vecino del quinto y pensé: “Vaya tropa, Mariano, yo a ti no te voto ni para presidente de mi edificio”.

Juan García Luján

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