“Efectivamente participé en la asamblea anual EU-ACP countries de la que soy miembro titular, los días 19, 20 y 21 de marzo de 2002 y en la que tuve varias intervenciones. No viajé en primera clase sino en Business. No viajé con mi esposa, que como les dije ayer, nunca me acompaña en mis viajes oficiales”, nos informa amablemente el diputado Fernández. Nos indica, además, que quizá confundiéramos a una colega eurodiputada que viajaba con él con su esposa, ante lo cual no nos queda más remedio que rectificar. Pero confirmada su presencia en esa cumbre, debemos preguntarnos cómo es posible que el viaje entonces se alargara desde el 16 de marzo hasta el 24, aun teniendo en cuenta que se emplean dos días en ir y volver. O sea, siete días de viaje oficial para una intervención en la asamblea parece un tute. No tenemos los elementos de juicio suficientes para calcular si es peor lo de las dietas.