Los munucipios de Telde, San Bartolomé de Tirajana y Agüimes, en la costa sureste de Gran Canaria, han cerrado algunas de sus playas tras la aparición de una gran mancha viscosa, de color amarillento y con mal olor.
En concreto, en Telde, en la playa de Melenara ondea la bandera roja después de que la Dirección Insular de Salud de Gran Canaria, dependiente del Gobierno de Canarias, recomendase su cierre “preventivo” hasta conocer los resultados de los análisis exhaustivos solicitados, tras las recientes incidencias detectadas en la costa del municipio. Se espera conocer los resultados analíticos a lo largo de este miércoles.
Según el Consistorio, hasta el momento, todas las analíticas ordinarias realizadas en las últimas semanas “han resultado aptas para el baño”. Sin embargo, y ante la persistencia de quejas vecinales por la aparición de olores “intensos” y algunas manchas en el litoral, la Corporación local ha solicitado a la Dirección General de Salud Pública un análisis más preciso y en profundidad, con el fin de descartar cualquier riesgo para la población.
En Agüimes, la bandera roja ondea en la playa de Vargas, mientras que en San Bartolomé de Tirajana, se ha prohibido el baño en las playas de San Agustín y Las Burras.
Ecologistas señalan a las jaulas de acuicultura como origen del vertido
Tras conocerse el alcance de este gran vertido, el colectivo Turcón–Ecologistas en Acción ha considerado que existen “indicios evidentes” de que esta contaminación no es un episodio puntual ni un vertido accidental, “como se ha querido hacer creer, sino que su origen son las jaulas marinas de acuicultura intensiva que operan frente a la costa, tanto en Telde como en otros puntos del litoral insular”.
Según este colectivo, ante la persistencia de las condiciones meteorológicas de viento del sur y del este en las últimas semanas y la extensión de la contaminación marina más allá del litoral de Telde, alcanzando playas del Sureste y del Sur de Gran Canaria, donde se han registrado aguas con aspecto aceitoso, malos olores y residuos flotantes similares a los detectados anteriormente en Salinetas, Melenara y Ojos de Garza, “se tienen que tomar medidas preventivas y contundentes”.
Turcón asegura haber recibido testimonios de bañistas que han sufrido en los últimos días infecciones cutáneas, otitis, gastroenteritis y otros cuadros irritativos tras el contacto con el agua en distintas playas de Telde, lo que, a su entender, “constituye un riesgo sanitario grave y evidente”.
Ante esta situación, el colectivo exige la adopción inmediata del principio de precaución y la suspensión temporal del baño en todas las playas teldenses hasta que se esclarezcan las causas y se garantice la seguridad sanitaria de las aguas. Hasta el momento solo hay cerrada una playa, Melenara.
“La salud pública está en juego. No se puede seguir restando importancia a una contaminación que se repite y se agrava con el tiempo del este y del sur. Las autoridades deben actuar con transparencia y responsabilidad”, expone Turcón–Ecologistas en Acción.
En Telde, añade, “echamos de menos la limpieza de residuos de la arena y de las rocas. Otros ayuntamientos ya lo hacen con sus respectivas empresas de limpieza”.
El colectivo reclama también la creación urgente de un gabinete de crisis en el seno del Gobierno de Canarias, en el que estén representados los ayuntamientos afectados (y cita cinco:Telde, Ingenio, Aguimes, Santa Lucía y San Bartolomé de Tirajana), el Cabildo de Gran Canaria, el propio Gobierno de Canarias, científicos de la ULPGC, los colectivos vecinales y las organizaciones ecologistas, “para dirigir una investigación independiente sobre el origen y la magnitud de la contaminación, así como, para coordinar medidas preventivas y de protección ciudadana”.
Asimismo, Turcón exige máxima transparencia informativa a las instituciones públicas y a la empresa responsable de las jaulas marinas, “dado que persisten las sospechas fundadas de que la contaminación proviene de las propias instalaciones acuícolas y no de un vertido accidental, como se ha intentado justificar en los últimos días”.
Por último, Turcón anuncia que presentará una denuncia formal ante la Agencia Canaria de Protección del Medio Natural para que se diriman responsabilidades ambientales y administrativas por los daños ocasionados al litoral y por la posible vulneración de la normativa de calidad de aguas de baño y de gestión del dominio público marítimo-terrestre e incluso se evalúa la posibilidad de presentar denuncia ante la Fiscalía de Medio Ambiente para dirigir una investigación al respecto.