España se suma a la propuesta alemana de crear un plan europeo de competitividad
MADRID, 3 (EUROPA PRESS)
El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, se ha adherido a la propuesta de la canciller alemana, Angela Merkel, de crear un pacto europeo de competitividad con unos pocos objetivos “claros y reales” para cada año que permitan a la zona euro ganarse la confianza perdida de los mercados.
La XXIII Cumbre bilateral entre España y Alemania celebrada en Madrid ha girado en torno al compromiso de los europeos de “fortalecer aún más” la moneda común a través de dos “grandes pilares”: el refuerzo ya comprometido del Pacto de Estabilidad y Crecimiento que fija el 3% como límite de déficit público para cada estado y el nacimiento de un nuevo pacto de Competitividad, según explicó Zapatero en rueda de prensa con la canciller alemana.
En este sentido, el presidente del Gobierno incidió en que las líneas principales propuestas por Merkel para el plan de competitividad son “de sentido común”, porque si se comparte una moneda única es necesario tener criterios económicos comunes.
Merkel, que ya cuenta con el apoyo de Francia a esta iniciativa, mostró su satisfacción por el respaldo de Zapatero a sus propuestas, que se presentarán este viernes en la cumbre de Jefes de Estado y Gobierno de la UE en Bruselas, y donde confía poder contar con el apoyo del resto de países a este principio.
La canciller precisó que la reunión de mañana no va a concretar el contenido de ese pacto, que se quiere aprobar en el Consejo Europeo de los próximos 23 y 24 de marzo, y que deberá adoptar previamente el Eurogrupo. En este sentido, señaló que España y Alemania, junto a sus socios europeos, aún deben dar “pasos importantes” hasta esa fecha.
Merkel defendió que Europa ha sabido “superar los retos” que han surgido a raíz de la crisis financiera internacional y ha demostrado “voluntad política” para adoptar las reformas necesarias que, aunque advirtió de que no van a surtir efecto en “dos o tres días”, crearán en un futuro “más puestos de trabajo”.
En esta línea, aseguró que las medidas adoptadas hasta ahora en Europa van “por el buen camino”, pero recordó que “cada uno tiene que hacer sus deberes en casa”, como la propia Alemania, que debe hacer “deberes” en materia de innovación para “situarse entre los mejores”.
Sin embargo, insistió en que es necesario fortalecer la competitividad en Europa por “el bien de los ciudadanos” y recalcó que estas reformas son la única manera de poder garantizar el bienestar de los ciudadanos. Merkel incidió en que, aunque los cambios “nunca son fáciles”, el mundo está cambiando a un “velocidad vertiginosa”.
PLAN DE COMPETITIVIDAD
La propuesta alemana, que persigue contribuir a atajar definitivamente la crisis de deuda en la eurozona, plantea limitar por ley o en la Constitución el déficit público, retrasar la edad de jubilación, suprimir las cláusulas automáticas de revisión salarial y de pensiones vinculadas a la inflación -como las que existen en España-- y aumentar el impuesto de sociedades.
Berlín condiciona el aumento y la flexibilización del fondo europeo de rescate a la aprobación de este plan de competitividad. De hecho, Merkel dejo claro en la rueda de prensa que no basta con que la UE sea solidaria, sino que también debe ser competitiva e innovadora en la economía global.
Preguntado por una eventual supresión de las claúsulas de revisión salarial en España, Zapatero defendió que la posibilidad de ligar o no los salarios a la evolución del IPC debe ser discutida por empresarios y sindicatos, y añadió que no le corresponde al Gobierno entrar en este debate.
Después de que la prensa se interesara particularmente por estas iniciativas, Merkel señaló que en la competitividad también juegan un papel importante aspectos como las inversiones, los costes laborales unitarios, los sistemas de seguridad social o la base imponible en el impuesto de sociedades, que actualmente son competencias nacionales.
Recalcó que cuando se vive en una unión monetaria es necesario estar dispuestos a una redacción similar, por lo que se mostró partidaria de que los indicadores que tengan relevancia en la competitividad entren en la política común, así como de lograr una mayor armonización entre países. “No hablo de más competencias sino de más coordinación”, añadió.
IMPUESTO DE SOCIEDADES
Respecto al impuesto de sociedades, Zapatero se mostró partidario de que en algunos aspectos de la política fiscal exista una “armonización” entre los países que comparten una moneda común, por lo que apostó por establecer unos márgenes sobre los que se puedan mover algunos tipos impositivos, como por ejemplo el impuesto de sociedades.
A este respecto, Merkel reconoce que Europa lleva años estancada a la hora de definir la base impositiva del impuesto de sociedades, algo en lo que todos los estados, incluido Alemania, deben reconocer su parte de culpa.
Sin embargo, incidió en la importancia de lograr una armonización de la base imponible de impuesto de sociedades y citó como ejemplo los logros alcanzados en Europa a la hora de armonizar el impuesto del IVA.