En la claqueta a tiza, Tazacortos

0

Tazacorte, el lugar que más ha osado a abrazar mis letras, acoge por tercer año consecutivo el Festival de Cine Fantástico Tazacortos. Qué puedo contarles. El año pasado formé parte del jurado en aquel septiembre espinado por la pandemia, el Festival regresa nuevamente en tiempos de la Covid-19, pero siempre con el tesón de mis compañeros Beatriz Gómez y Juan Diego, ellos le echan un pulso a lo que sea y si es cine, pues mejor y cómo no, acaban ganando. Como decía en la Gala de los Goyas 2021 Ángela Molina: “El cine no muere nunca, frente a las dificultades y las barreras impuestas por la pandemia, lo mejor es seguir creando, si cabe más unidos que nunca”.

Aquí estamos para apostar desde El Chester por Tazacortos III, nos envolveremos en ese abrazo de puesta de sol del que sabe tanto Tazacorte, al que siempre regreso, como si regresara a mi hogar, que no es igual que regresar a una casa. Me encanta el cartel, lo dice todo, sí, eso que decía Ray Bradbury: “Hay que inyectarse cada día de fantasía, para no morir de realidad”. Tazacortos es ese espacio de la magia, de este género de fantasía, que ayuda a perderse, cuando no hay alternativa, ni escapatoria posible, ante una realidad con tantos títulos de crédito desoladores, cuando dirige la propia incertidumbre, el rumbo de esta película, que nos ha tocado protagonizar, sin elegir, sin hacer un casting, ya hace mucho tiempo que vivimos, dentro de una película de terror… ¡Solucionado! Tazacortos III viene pisando fuerte para hacernos olvidar lo que se antoja inolvidable…

Claqueta preparada, secuencia, plano y toma, fuerte chack… ¡Acción! ¡Bienvenidos Beatriz Gómez y Juan Diego a mi Chester!

¿Quiénes son los capitanes de este barco fantástico? 

J.D: ¡Pues yo soy Juan Diego! Un bagañete con el culo inquieto y una cabecita que no para de imaginar cosas y tener ideas disparatadas. Desde pequeñito mi hermano y yo siempre estábamos dibujando o inventando cosas; cómics, historietas, juegos... Según íbamos creciendo incluíamos cosas a nuestros empeños creativos, como la música, la animación, o los videojuegos... Así que teniendo esto en cuenta, y que nuestros padres siempre nos dieron acceso e incentivaron que fuéramos creativos, no es raro que los dos termináramos estudiando cosas relacionadas con el campo de las artes. 

En mi caso, me di cuenta un día mientras trasteaba con un programa de edición de video de que al unir planos ocurría algo único. Era como si cogieras distintas piezas de un puzzle que al ordenarlas de según qué manera, podían contar historias distintas. Además de poder añadirle música y sonidos para remarcar e intensificar lo que querías contar.

Así que decidí hacer las cosas bien y empezar por el principio. Lo primero que hice fue estudiar fotografía. ¿Por qué? Pues porque para mí es lo esencial, es el lenguaje con el que vas a trabajar, a partir de ahí solo tienes que ir añadiendo cosas. El siguiente paso fue estudiar realización audiovisual, donde aprendí a cómo gestionar un rodaje, a trabajar en equipo y la importancia de una buena organización. A parte de todo eso también es esencial ver pelis y escuchar muchísima música. Tener referentes es vital para poder crear obras más ricas.

Una vez terminé de estudiar, tocaba buscar trabajo. Así que durante unos años fui ganando experiencia en diversos rodajes, también trabajé mucho en cartelería y como fotógrafo. Con los años conocí a Bea y comenzamos a trabajar juntos… ¡Y bueno casi 10 años después aquí estamos! 

B.G: ¡Y yo Bea! Más conocida en el campo cultural y de la comunicación como Beatriz Gómez. Natural de Los Llanos, pero con medio corazón en la Isla de los volcanes; Lanzarote, que me vio crecer. 

Mis inquietudes artísticas fueron tempranas y aunque la literatura fue lo que más influyó en mí, escribiendo mi primera novela con 17 años, me he visto tentada por otras disciplinas como el cine, el teatro, el diseño y alguna otra. 

Mi campo son las humanidades y la comunicación. Pero por cosas de la vida, encuentras amistades que hablan tu mismo idioma y terminan introduciéndote en otras artes. En el caso del cine empecé escribiendo guiones, y finalmente,   produciendo mis propias obras audiovisuales. 

Hasta que descubrí que la cultura era lo que me hacía realmente feliz, y decidí especializarme en Gestión Cultural, y desde entonces, no he parado de crear y emprender.

 

¿Cómo nace Tazacortos?  

J.D: Tazacortos rondaba en mi cabeza desde hace muchos años. Lo primero que tenía era el nombre, y si bien no tenía muy claro cuál iba a ser la temática sí que tenía bien claro que la ubicación era la idónea, tanto por el clima, como por lo acogedor del municipio bagañete. Ahora que lo pienso quizás tenga que ver con los recuerdos de mi niñez y los buenos ratos que pasábamos en los cines de verano. 

La idea iba creciendo y tomando forma en mi cabeza. Y pasados los años se dieron las condiciones perfectas. Me enteré a través de una amiga de que el Ayuntamiento de Tazacorte buscaba crear un proyecto cultural y así es como comienza todo.

Llamé a Bea corriendo y nos pusimos a organizar como locos. Yo tenía claro que quería un festival de cine fantástico, abarca todos los subgéneros que más me gustan y de los que tengo conocimiento, pero no sabíamos si gustaría, o encajaría con lo que buscaban. Una vez reunidos con el alcalde le contamos el proyecto y al instante dijo: “Tiene que ser de cine fantástico, que esto es ”Tazacorte“. Bea y yo nos miramos, sonreímos, y vimos que nuestro hijo había nacido. 

B.G: Yo ya tenía experiencia acumulada en la gestión de proyectos de esta índole, y también uno de mis sueños era crear un festival de cine, y tenía claro que quería contar con Juandi para ello porque ya habíamos trabajado juntos en audiovisual y nos complementábamos muy bien. 

La temática me daba un poco igual la verdad, pero sí me apetecía crear un festival porque tenía la necesidad de buscar un espacio donde poder construir historias y coincidir con otros compañeros del gremio. 

Soy de esas que espera impaciente año tras año a que abran convocatoria otros festivales para participar y se me hacía larga la espera, porque al final esto se convierte en una adicción confesable. 

Cuando nos sentamos para plantear este proyecto, los dos nos hacíamos la misma pregunta: ¿Tendrá aceptación?, pero nos pudo la ilusión que pusimos en ello y nos sentimos muy respaldados desde el minuto uno.

Tazacortos 1, ¿Qué ocurría?

J.D: Para mí fue la primera vez que me enfrentaba a un proyecto de estas magnitudes, como uno de los directores al frente. Lo primero que teníamos que hacer era diferenciarnos y crear un festival que fuera divertido para los participantes y los espectadores. Así que no dudamos en aprovechar el clima de Tazacorte y preparar proyecciones y talleres al aire libre. Una decisión que tomamos casi que al unísono fue que el festival debía inaugurarse en la noche de San Juan; la noche más mágica del año parecía perfecta para un festival de cine fantástico.

Si bien la inauguración y la clausura fueron de lujo y tuvieron una gran acogida, los talleres no funcionaron tan bien. Pero lejos de ser pesimista, lo achaco a que era nuestro primer año y todavía teníamos muchas cosas que aprender. 

Sea como fuere, el festival fue un éxito, tanto de participación como de asistencia. Esto ocurría antes del covid, recuerdo a la gente apelotonada buscando un huequito para poder ver los cortos. Visto esto, la posibilidad de una segunda edición se vislumbraba en el horizonte. 

B.G: Pues una mezcla de emoción y miedos. A pesar de estar acostumbrada a organizar este tipo de eventos, me daba un pánico atroz porque era el comienzo y no sabía cómo iba a reaccionar el público ni los participantes, porque por más segura que tú estés de tu trabajo, siempre son ellos los que te recuerdan si está bien o está mal con su respuesta. 

Y ahí, en esa noche mágica de San Juan, recuerdo el día de la inauguración con mucho sentimiento. Cuando vi cómo el público se volcó con este proyecto, le dije a Juandi que teníamos que pedir nuestro deseo. Minutos después, fuimos a la playa y quemamos en la hoguera el papelito donde pedimos con mucha ilusión que esta fantasía fuera el principio del comienzo. 

Otro momento que recuerdo y que se ha vuelto tradición, es nuestro abrazo fraternal después clausurar la edición. Son cositas que una vive con mucha alegría y son las que permanecen. 

Tazacortos 2. Covid mediante.

J.D: ¡Buffff! ¡Tazacortos 2! Menuda aventura. La segunda edición estuvo cargada de contratiempos. El Covid aparece en nuestras vidas y lo cambia todo. Nuevos protocolos, restricciones horarias, de aforo y todas esas historias que ya nos sabemos todos. Tuvimos que trabajar mucho junto al Ayuntamiento y con Evento 7, una empresa palmera que fue imprescindible a la hora de poder llevar a cabo el festival.

Tras atravesar un mar de documentos y papeleo conseguimos organizar el festival para septiembre. Echamos mano de la imaginación y del streaming para que todos los que no podían estar allí pudieran verlo desde sus hogares.

Para mí la segunda edición fue más íntima y especial, pero la realidad es que fue mejor a la primera en muchos aspectos. La participación creció y la repercusión mediática fue superior. ¡Así que éxito de nuevo y a por Tazacortos III! 

B.G: Una lucha constante hasta el último momento porque atravesábamos una situación con la que continuamos aún, y eso hay que tenerlo muy presente. 

Para mí fue una locura mayor porque me encargo de tener toda la documentación en orden y nunca había tenido tanto trabajo junto, pero tener una mínima posibilidad de realizarlo fuera de fecha, ya era toda una motivación para seguir adelante. 

Y finalmente salió contra todo pronóstico, teniendo más participación que en la primera edición, igualmente el público, que volvió a responder maravillosamente agotando todas las entradas a la media hora de salir a la venta, porque tuvimos que regular la entrada del recinto para no pasarnos del aforo. Pero gracias a las nuevas tecnologías pudimos retransmitir en streaming y muchos pudieron disfrutarlo desde la distancia. Sé que no es lo mismo, pero no nos quedó otra alternativa.  Sólo espero que pronto podamos volver al comienzo y reunirnos todos para disfrutarlo de verdad.

¿Qué nos espera en esta tercera edición? ¿Habrá sorpresas? 

J.D: Este año es muy importante para nosotros. Hemos llegado hasta aquí y esto comienza a consolidarse. Así que este año queremos volver a la idea original y realizar la inauguración en la noche de San Juan y realizar actividades a lo largo de la semana para terminar con la clausura y entrega de galardones… Si, ya sé que no he dicho gran cosa… Pero es que habrá sorpresas, este año queremos hacer algo distinto y que la gente no olvide. ¿Pero si te lo cuento arruinó la sorpresa! Así que paso palabra.

B.G: ¿Qué nos espera? Magia y fantasía por un tubo y muchísima más emoción que en otras ediciones. Esto se ha convertido en Tazacortos III y esto tiene un significado especial que no se puede revelar hasta que llegue el gran día. Así que, habrá que acercarse para descubrirlo!

Premios y menciones

J.D: Pues tenemos unos cuantos, si bien queremos resaltar el marco idóneo que es Tazacorte, también queremos que nos enseñen otros lugares de la isla igual, de especiales y bonitos. Por eso tenemos varios premios.

Tenemos por un lado la sección oficial, a la que pueden presentarse obras grabadas en cualquier lugar de La Palma. Luego tenemos el San Miguelito, destinado a obras rodadas íntegramente en Tazacorte. El premio del público, la sección juvenil y el Galardón Marcela Rodríguez, de visibilización del colectivo LGTBI+. 

Todos estos que hemos mencionado tienen una remuneración económica, o algún regalo para los ganadores.

Por otro lado, tenemos las menciones del jurado, destinadas a varias características como mejor fotografía, efectos especiales, mejor actor/actriz, etc. 

B.G: Ya Juandi ha hecho un repaso rápido y conciso. Yo sólo quiero resaltar el valor que le damos al premio del público, que tiene una remuneración igual al resto, porque para nosotros es muy importante la participación y la decisión de todas esas personas que se acercan al festival. Y esto es un premio que, aunque lo otorgan muchos festivales, ninguno lo remunera, algo que siempre vimos muy mal y que quisimos implantarlo en el nuestro en igualdad de condiciones. 

También destaco el Galardón Marcela Rodríguez, premio al corto que sea capaz de visibilizar correctamente todos los derechos de igualdad y que hoy en día, es muy necesario en la sociedad, porque todavía hay mucho camino por andar para conseguir que todo sea justo e igualitario para todos y todas.

¿Qué quieren contarnos los impulsores y cineastas de este festival Beatriz Gómez y Juan Diego Suárez? Adelante compañeros.

J.D: A mí me gustaría decirles a todos aquellos que nos estén leyendo que se animen, que cojan una cámara, y vengan a visitar Tazacorte. Que dejen volar su imaginación y creen algo, por muy disparatado que les parezca. 

B.G: Yo también los animo a introducirse en este mundo tan fantástico y nunca mejor dicho. 

Y recordarles que, aunque la temática del festival sea fantástica, cualquier corto que cuente algo irreal ya entra dentro de cualquiera de los subgéneros que existen dentro de este género. 

 No necesariamente tienen que saber hacer efectos especiales para que el corto pueda participar, porque hay mucha gente que se confunde con eso, y quería resaltarlo. 

Así que, no se desanimen y cojan la cámara, el móvil, o cualquier otro dispositivo óptimo que les sirva y atrévanse a crear. Tazacortos III, les está esperando!

Juandi y Bea mi abrazo hacia Tazacorte, mi guiño hacia Tazacortos. Hay una idea dentro de mí, un sueño, una fantasía, un corto, una película, me veo en el lugar de los atardeceres de cine, asomada a un balcón, y quién sabe si algún día será mi casa, desde aquí mi gratitud, por este lugar en el que he sido tan valorada. Es llegar allí y sentirme arropada.

Un placer de Chester Juandi más Bea más Tazacortos, ha sido como un Chester a tres.

¡Gracias compañeros!

Etiquetas
stats