Varios centros abandonan un concierto en Gran Canaria por la expulsión de alumnado con necesidades especiales: “Es discriminación”

Jennifer Jiménez

Las Palmas de Gran Canaria —
24 de octubre de 2025 19:19 h

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“Es discriminación”. Así califican algunas personas afectadas lo ocurrido este viernes en la sala Gabriel Rodó de la Orquesta Filarmónica de Gran Canaria cuando alumnado con necesidades especiales y docentes disfrutaban de un concierto didáctico 'Peer Gynt'. Según ha denunciado la comunidad de familias y afectados de enfermedades raras en Canarias Tribu Cebras, el narrador del concierto, Fernando Palacios, “tuvo el intolerable gesto” de acercarse a un grupo de estudiantes con necesidades educativas especiales y pedirles que abandonaran la sala.

“Un acto de exclusión que no solo hiere, sino que contradice todo valor educativo, cultural y humano”, subraya esta comunidad de familias.

Este incidente supuso que otros centros se levantaran y abandonaran la sala en señal de solidaridad, por lo que el concierto no llegó a término. “Su reacción fue ejemplar, ellos sí que demostraron lo que significa la verdadera educación en valores, respeto e inclusión”, señala Tribu Cebras.

Según ha avanzado Canarias7, el alumnado del centro al que se les pidió que salieran del recinto fue el de San Juan de Dios. Desde el centro señalan a Canarias Ahora que “lamentan el comportamiento de este señor” y agradecen “la solidaridad del resto de colegios” que acudieron al concierto que abandonaron la sala.

Desde San Juan de Dios confirman a este periódico que el director de la Orquesta ha contactado con el centro para disculparse. Subrayan que es lamentable lo que ha sucedido pero se quedan con lo positivo de la solidaridad del resto de centros cuyo alumnado estuvo interactuando con el de San Juan de Dios a la salida.

El gerente de la Orquesta Filarmónica de Gran Canaria, Manolo Benítez, señala a Canarias Ahora que se están investigando los hechos y que se está hablando con todas las partes. Asegura que ya ha contactado con todos los centros que asistieron a este último concierto didáctico y está pidiendo disculpas a todos ellos, pues los colegios sintieron que había sido discriminatorio.

Benítez recuerda que estos conciertos llevan realizándose 35 años ininterrumpidamente, donde la inclusión es una parte fundamental, y lamenta que haya podido producirse un incidente que lo empañe y que ponga en duda el compromiso de la Orquesta Filarmónica con la inclusión. Además, insiste en que la Orquesta buscará la forma de compensar lo que ha ocurrido y está en contacto con los profesionales y tomando medidas.

“Nosotros nos lamentamos, nos disculpamos, nos disculpamos ante la comunidad educativa”,subraya Benítez. Además, remarca que “de todo lo que ocurre tenemos la obligación de aprender”. No obstante, agrega que “no nos queremos esconder para nada, estamos aquí y somos los responsables de la organización y asumimos que ha habido un problema y como responsabilidades nos disculpamos con cualquiera de los alumnos y profesores”.

La Orquesta Filarmónica ha emitido además un comunicado donde se recoge el mismo sentir que transmitió Benítez a este periódico y señala que “lamenta profundamente los incidentes ocurridos en la mañana de este 24 de octubre durante el transcurso del concierto escolar”. La Fundación lamenta lo sucedido, que está “lejos del espíritu educativo y artístico que inspira todas las actividades de la Orquesta Filarmónica de Gran Canaria”.

“Deseamos dejar constancia de que este incidente, aislado y puntual, no refleha en absoluto los valores ni la trayectoria de nuestra entidad”, remarca la Orquesta, que incide en que desde hace décadas ha sido pionera en la programación de conciertos didácticos, “consolidándose como una referencia en la difusión de la música sinfónica entre el público infantil y juvenil”.

“Como es nuestra obligación, estamos analizando lo sucedido y adoptaremos las medidas necesarias para garantizar que hechos similares no vuelvan a repetirse”, aclara la Orquesta, que emplaza a los centros a futuros encuentros para analizar medidas conjuntas para compensar el perjuicio para su centro.

La Consejería de Educación, por su parte, ha señalado en un comunicado que lamenta el incidente ocurrido este viernes con la narración del concierto pedagógico ‘Peer Gynt’, ofrecido por la Orquesta Filarmónica de Gran Canaria, en el que se ha visto afectado un grupo de alumnos y alumnas con necesidades educativas especiales.

“Entendiendo que se trata de un incidente aislado y al margen de la propia Orquesta y sus integrantes, cuyo compromiso con este tipo de actividades está avalado por más de treinta años de colaboración, aplaudimos la actitud y empatía mostrada por los centros asistentes que optaron por dejar de participar del concierto en solidaridad con el grupo afectado. La Consejería destaca la importancia de mostrar tolerancia cero ante cualquier actitud discriminatoria y, en particular, hacia el alumnado con discapacidad”.

“Si bien el contenido y fin pedagógico de la iniciativa, externa a la Consejería, garantiza la inclusión de este alumnado, su desarrollo, en concreto durante la última función, no ha sido el correcto, por lo que se adoptarán las medidas oportunas para resarcir este agravio”, insiste el área que dirige Poli Suárez.

La asociación Tribu Cebras, por su parte, ha pedido además la dimisión “inmediata” de Fernando Palacios y una disculpa pública por parte de la Orquesta Filarmónica de Gran Canaria y por parte de la Fundación DISA.

El personal de la Orquesta Filarmónica de Gran Canaria y su director artístico y titular, Karel Mark Chichon, han insistido en aclarar este sábado que el narrador que excluyó a alumnado de educación especial de un concierto didáctico, Fernando Palacios, no es miembro de la formación, sino un colaborador.

Además, han tachado los hechos de “gravísimos” y expresan su “mezcla de indignación absoluta y profunda tristeza”. Por ello, el colectivo de trabajadores y trabajadoras de la Fundación Orquesta Filarmónica de Gran Canaria hace pública su “rotunda condena” y aprovecha para “informar de que dicha decisión fue tomada unilateralmente por el narrador Fernando Palacios”.